Conmemoran el XV Aniversario de la masacre de Aguas Blancas con una marcha caravana que culminó en un mítin

Por Juan Francisco Rodríguez

Coyuca de Benítez, Gro.- Alrededor de un millar de personas provenientes de diferentes estados de la republica y regiones de esta entidad  pertenecientes a las organizaciones: Asamblea Popular de Pueblos de Guerrero, Coordinadora de Movimientos Sociales del Estado de Guerrero; Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos en México, AFADEM-FEDEFAM; Fundación Diego Lucero, FDL;  Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos, LIMEDDH; Organización Campesina de la Sierra del Sur OCSS; Organización Popular de Productores de la Costa OPPCG, Comité del 68, pro Libertades Democráticas, C 68;  Parlamento de Derechos Humanos, PDH. CETEG; FECSM;  sección  17 de Mineros  de Taxco, TADECO, Frente Libre Hermenegildo Galeana;  Frente Mexicano pro Derechos Humanos, FMPDH, Colonia Lucio Cabañas Barrientos, (Acapulco); Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras al Proyecto Hidroeléctrico, “La Parota” , CECOP. Se concentraron en la cancha ubicada en la salida en Aguas Blancas.

De ahí partieron en una marcha-caravana hacia el lugar conocido como El Vado de Aguas Blancas, donde minutos antes del arribo, Benigno Guzmán Martínez dirigente de la OCSS y Martina Reza Andrade, una de las viudas, habían depositado previamente una ofrenda floral en la cruz erigida a  Clímaco Martínez Reza uno de los caídos.
Los manifestantes portaban mantas y pancartas alusivas al evento donde demandaban justicia, castigo a los responsables, Aguas Blancas 15 años de impunidad, ni perdón ni olvido, castigo a los asesinos y cárcel a Rubén Figueroa.
Entre los más de quince  oradores participó Minerva Adame Mondragón, representante de las viudas de los masacrados, en seguida continuó Roció Mesino Mesino, quien dio a conocer el manifiesto de la Organización Campesina de Sierra del Sur, donde recalcó que se encontraban en el lugar donde hace 15 años el chacal de Rubén Figueroa Alcocer, con su gabinete de asesinos como: Héctor Vicario Castejón, Rubén Robles Catalán, Rosendo Armijo de los Santos, Esteban Mendoza Ramos, funcionarios de primer nivel prepararon, planearon y ejecutaron la cobarde masacre aquel 28 de junio del año 1995.
Adelantó que debido a la indiferencia de los poderes en el estado y el país  que mantienen este caso en el olvido, mientras los asesinos campean en plena impunidad llevarán el caso ante la corte interamericana de los derechos humanos.
Posteriormente continuaron José Sánchez Sánchez, que dio a conocer un balance jurídico, Ranferi Hernández Acevedo, del movimiento social de izquierda, Arturo Hernández Cardona, de la Unión Campesina Emiliano Zapata, Felipe Flores, Roberto Hernández Mujica de la sesión 17 de mineros de Taxco, Roberto Jiménez García, de la sección 22 de la CETEG, Micaela Cabañas, Hija del extinto Guerrillero  y Catarino Cortes, descendiente del combativo luchador Carmelo Cortes Castro, Rosario Merlín del PRD,Ivan Ojeda y Javier Monroy de la TADECO, quienes  coincidieron en sus intervenciones  destacando que habían logrado la unidad de acción,  situación que no había sido posible  en  años anteriores , pero hoy pugnaran por la justicia conjuntamente.
Demandaron castigo a los responsables de la masacre, que se cumplan las dos recomendaciones de la suprema corte de justicia de la nación y de la comisión interamericana de los derechos humanos donde  su veredicto fue que el responsable de la masacre fue Rubén Figueroa Alcocer, alto a la persecución a los luchadores sociales, no a la criminalización a la lucha social, no al proyecto Hidroeléctrico de la Parota, alto al hostigamiento a los líderes de la CETEG, solución a los trabajadores del SME, CANANEA, Cumplimiento a la sentencia del caso Radilla Pacheco, presentación con vida, a  todos los desaparecidos y libertad presos políticos . Documento que signaron por la unión  de obreros y campesinos.
Durante dos horas de duración del acto se obstruyó el tránsito vehicular en el tramo carretero Coyuca-Tepetixtla ante el malestar de los conductores y pasajeros que esperaban impacientes bajo los rayos del sol que el evento culminara.