Continúan vendiendo fuera de escuelas y hospitales comida chatarra

Los vendedores de fritangas tendrán que cambiar su oferta de este tipo golosinas y comida grasosa por alimentos naturales frescos y nutritivos y observar estrictas medidas de higiene, el que no se adapte a las nuevas disposiciones se retirará de su lugar de venta hasta que ofrezca otro tipo de comida más nutritiva, dijo el regidor de salud.
Con relación al anuncio de los secretarios de salud y de educación a nivel federal Dr. José Angel Cordoba Villalobos y el Maestro Alonso Lujambio, respectivamente, en el sentido de que ahora sí va en serio el retiro de comida chatarra en escuelas públicas y privadas del nivel básico, el Dr. José María Morelos Martínez, regidor de salud, explicó que por lo que se refiere a este municipio de Zihuatanejo este asunto ya fue puesto a consideración del cabildo y se aprobó por unanimidad el retiro de la llamada comida chatarra de los centros escolares y edificios públicos así como hospitales.
Agregó que estas acciones se llevarán a cabo a través de la dirección de reglamentos aclarando que el retiro de la comida chatarra debe entenderse de que no se trata de acabar con las fuentes de empleo que tienen las personas, tanto en las cooperativas escolares así como las que lo hacen de forma irregular y ambulante afuera de las escuelas y edificios públicos, sino que estas personas al dejar o prohibírseles la venta de comida chatarra y golosinas grasosas y el consumo de refrescos, principalmente de cola,  mientras cumplan con las normas de higiene deben adoptar nuevas formas para vender alimentos nutritivos y agua natural en vez de refrescos para ir eliminando la obesidad no solo de los alumnos sino que también de la población en general.
Aseguró Morelos Martínez que, “vamos con todo para eliminar de la dieta de los niños la llamada comida chatarra, el ejemplo ya lo pusieron los secretarios de educación y el de salud que por primera vez logran conjuntar esfuerzos para ir de forma organizada y sistematizada en contra de la mala nutrición en México, que afecta tanto a la educación en el aprendizaje de los niños y jóvenes como a la salud de la población en general y se está trabajando con ganas”.
Denunció el regidor que es tan descarada la publicidad y mercadotecnia de empresas refresqueras, principalmente de cola que han estado donando computadoras en las escuelas por venderles sus aguas dulces carbonatadas sabor cola, “pero no podemos anteponer los intereses de la salud pública con los intereses económicos de empresas transnacionales que han contribuido a incrementar la obesidad en la población a pesar de saber el daño que sus productos causan a tal grado que ahora nos venden sus productos de cola Light”.
Dijo que la lucha contra la comida chatarra se agudiza debido a que vendedores ambulantes irresponsables se niegan a quitarse de las entradas de las escuelas y de los hospitales para seguir con la venta de comida chatarra y se resisten a cambiar ese tipo de mercancías por otro tipo de alimento más sano y para seguir con la venta de sus alimentos grasosos acuden a solicitar la protección de regidores y otras autoridades como padrinos.
Destacó que muchos vendedores ambulantes están amparados por partidos políticos a los que no les interesa la salud del pueblo, lo que les interesa es ganar dinero y votos de sus protegidos.
Mencionó que aquí es donde como autoridades van a seguir insistiendo “y que el cabildo debe tener la responsabilidad de sacar adelante este proyecto de salud, tenemos que sumarnos todos, tenemos que ofrecer cada uno de nosotros nuestra voluntad para poder romper este vicio”.
Asimismo dijo que los malos hábitos alimenticios han sido cuestión de educación, por ello es la conjunción de esfuerzos entre las secretarías de salud y de educación para luchar por un nuevo modelo de alimentación desde nuestras casas y la escuela, “muchos de nosotros siendo profesionistas nos sentamos en una taquería para deleitarnos con fritangas acompañados de nuestros refrescos de cola, en vez de consumir frutas y verduras, nos es más fácil consumir alimentos ricos en grasas y carbohidratos porque desde pequeños nos hicieron adictos a lo dulce, porque a los niños en vez de darles una fruta les damos un  dulce”.
Recalcó que el proyecto de salud en el municipio no es quitar fuentes de trabajo al prohibir el consumo de comida chatarra, es concientizar a los vendedores que deben de cambiar el tipo de comida que ofrecen supervisados por la secretaría de salud.
Por lo tanto, insistió en que se deben retirar todos los puestos de comida chatarra que hay a las entradas de edificios parques públicos y hospitales, así como las máquinas tragamonedas que ofrecen todo tipo de refrescos embotellados y bolsitas con toda clase de frituras y galletas y pastas hechas con azúcar refinada, almidones y harinas que no aportan valores nutricionales al cuerpo humano.