Por Norberto Cruz Cuevas
Chilpancingo, Gro.- Las elecciones del domingo 4 de julio en 14 estados del país en los cuales se renovaron 12 gubernaturas, que dio como resultado la pérdida del proceso electoral para los candidatos del PRI, en los estados de Sinaloa, Oaxaca y Puebla, fue objeto por parte de los integrantes de la Comisión permanente en el Congreso de un amplio y acalorado debate donde priístas, perredistas y convergentes se dijeron su verdad en la tribuna.
Fue Efraín Ramos Ramírez, Coordinador Parlamentario del Partido Convergencia quien inició el debate, al señalar que el PRI no tiene la fuerza que no posee la que presumía tener para recuperar la presidencia de la República.
La relevancia de la participación ciudadana y los viejos recursos de la alquimia electoral, en esta ocasión no le dieron al PRI los resultados esperados. No obstante que, se puso en marcha una abierta elección de estado.
Destacó que ninguna fuerza política tiene el respaldo electoral suficiente para gobernar por sí sola. A partir de las elecciones presidenciales de 1988, este ha sido un hecho recurrente en el sistema político mexicano. Desde entonces las tres principales fuerzas políticas, han alcanzado cuando mucho −en los comicios presidenciales− un tercio de la votación, pero nunca han obtenido el 50 por ciento más uno de los votos.
Señaló que México necesita un cambio de rumbo. El modelo de desarrollo impuesto al país desde 1982 −de común acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial− por el grupo político multipartidista que conocemos como salinismo, está agotado y en sus tres décadas de vigencia no ha generado el crecimiento económico prometido, ni el millón anual de empleos, ni la modernización tecnológica de la planta productiva y menos aún la exitosa inserción de México en la economía mundial, como atinadamente lo acaba de poner de relieve la CEPAL no sólo en el caso de México sino en el de toda la América Latina.
Las fuerzas que dentro del PRI se oponían a este rumbo han sido expulsadas de sus filas o lo han abandonado por iniciativa propia, ante la poca posibilidad de incidir desde adentro de este instituto político en la transformación democrática del país.
Reitero que las fuerzas que en el PAN se oponen al predominio en la vida pública de los dueños del dinero, están siendo acosadas y presionadas para que devuelvan al PRI la presidencia de la República.
Dentro del PAN se está gestando la resistencia en contra de este propósito de “Los Dueños de México” y un cierto renacimiento del espíritu democrático y de lucha efectiva por el bien común que luego del 68 marcó el desempeño de esta formación política, cuando era parte de la oposición. Es un movimiento que viene desde las bases del panismo y que busca neutralizar los titubeos y la incongruencia de sus dirigentes.
Por otra parte, entre los sectores democráticos se está abriendo paso la comprensión de que los males nacionales tienen su verdadera raíz en la casta oligárquica que se ha enriquecido desmedidamente con la privatización y el saqueo de los bienes nacionales, bajo el amparo del salinismo y en cierta complicidad con los poderes fácticos.
Necesitamos devolver al Estado mexicano la capacidad de determinar el rumbo de la Nación y de reconstruir, con la más amplia participación de la ciudadanía, los fundamentos de una sociedad libre, efectivamente democrática, que promueva la justicia, la equidad de géneros y la igualdad social; una sociedad donde el libre desarrollo de cada uno sea condición imprescindible para el libre desarrollo de todos.
Dijo que se requiere un México próspero y justo. Donde el trabajo, la riqueza y el desarrollo sean compartidos y los mexicanos podamos tener salarios e ingresos justos y donde el estado promueva la equitativa distribución de la riqueza y la efectiva protección de los consumidores ante el poder y abusos de los oligopolios.
La ética republicana debe imperar en nuestra vida pública. El servicio público debe dejar de ser fuente del enriquecimiento ilícito y del derroche del erario.
Los impuestos y gravámenes que pagamos los más de 23 millones que sí contribuimos al fisco, deben servir para financiar el desarrollo nacional y no para ser transferidos a un reducido grupo de grandes corporaciones consolidadas, apenas 422, que han hecho del apoderamiento de los recursos públicos y del abuso de las prerrogativas fiscales que la ley les brinda, la manera primordial de su desmedido enriquecimiento.
Debemos apoyar con créditos, estímulos fiscales eficaces y apoyos estratégicos del estado a los miles de micro, pequeños, medianos y grandes empresarios que sí se la juegan con México, para que puedan abatir costos de producción e intermediación, generar empleo de calidad y bien remunerado y modernizar tecnológicamente la planta productiva y la gestión de las empresas.
No queremos que unos pocos supermillonarios se sigan beneficiando del esfuerzo nacional; por el contrario México necesita de cientos de miles, de millones de emprendedores que quieran al país y lo ayuden a lograr los grandes sueños que nuestra Nación espera cristalizar desde hace 200 años.
México necesita un gran Acuerdo Nacional para la Promoción del Desarrollo. Este Acuerdo se puede lograr si todas las fuerzas políticas nos lo proponemos y actuamos con determinación y efectiva voluntad de cambio.
Dijo que la nación necesita un Gobierno de Coalición Nacional. En Convergencia nos mantenemos firmes en esta disposición unitaria, la cual seguiremos promoviendo porque es la raíz y razón de nuestra existencia como partido político y porque la consideramos como la única manera factible de sacar adelante los propósitos y la viabilidad de la Nación.
Por su parte del diputado del PRI, Marco Antonio Leyva estableció que el tricolor es pionero en los procesos de renovación de la reforma electoral, como la que hiciera en 1967, Reyes Heroles al frente de la Secretaria de Gobernación, o bien la que impulsará el ex presidente, Ernesto Zedillo Ponce de León en 996, dando un paso en la imparcialidad de los organismos electorales y que también el PRI fue impulsor de los procesos internos en el país
Dijo que ha establecido la sociedad que los gobernadores no intervengan en los procesos electorales destinando recursos económicos, como sucedió en el distrito 03 de Guerrero, con recursos del programa de Guerrero sin Hambre que tiene 700 millones de pesos, que estos recursos no se utilicen con un sentido electoral y para ello se establezca un acuerdo político con el gobernador de Guerrero, que ha dicho que quiere “transparencia en el manejo de los recursos públicos”, al igual que los diputados del PRI, en su momento transparentaron el manejo de los recursos del ramo 33 en los cabildos, para un uso diferente al destinado con anterioridad.
Aseveró se comenta mucho el regreso de las estructuras del viejo PRI, pero que al igual también el PAN ha conducido ineficazmente las políticas publicas y sociales a lo largo de 10 años y que en Guerrero, el PRD ha tenido ya 5 años para cambiar lo malo, que hoy, nos vienen a decir que con el autoritarismo y los viejos esquemas caciquiles el tricolor se trata de levantar nuevamente.
A su vez el diputado del PRD, Celestino Guzmán Cesáreo manifestó que la elección del 4 de julio, se tuvo varias lecciones, que desde un inicio se realizo una amplia campaña descalificando las alianzas, que el resultado fue un éxito para los candidatos del PRD donde se gano en tres estados y en dos más se habrán de dimitir las justas en los tribunales, que ahí esta, la evaluación de la sociedad y de los votantes.
Precisó que lo real, es que se detuvo el carro completo que el PRI había pregonando 12 de 12, que ahí esta los resultados que la coalición descarrilo el carro completo, que estos resultados dan impulso a la coalición de los partidos políticos en Guerrero, para el proceso del 30 de enero del 2011, que la gente los conoce a los precandidatos del PRI que son los mismos que durante años han detentado el poder y que desde hoy les decimos que no canten victoria.
Por su parte el perredista, Carlos Reyes Álvarez, dijo que Marco Antonio Leyva viene a justificar aquí en tribuna los cambios de las fuerzas democráticas del país, que son a estos actores a los que se les debe de reconocer su participación en el cambio que el México aspira.
Dijo que este trabajo es también de los priistas los que ya no están en el tricolor, sobre las denuncias del Distrito 03 invitó al diputado a presentar las pruebas ante las autoridades respectivas
Y dijo porque no se toma una decisión y se hace un exhorto al gobernador sobre el programa de Guerrero sin Hambre, que no cree que haya ninguna objeción para ver como opera los 700 millones de pesos de estos recursos.
Indicó que el cambio no es fácil de realizar, cuando se encuentran estructuras deterioradas, que no es en 5 años como se puede construir un nuevo Guerrero, que el PRD esta dejando las bases para hacerlo, y que a marco Antonio Leyva le consta ya que hace una semana elogió la labor del gobernador Carlos Zeferino Torreblanca por su labor al frente de la administración, el priista permaneció impávido y calló.
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