Campesinos están causando un ecocidio en el ecosistema

Pedro Patricio Antolino, (Corresponsal)

Tecpan de Galeana, Gro.- Derivado del tratamiento tanto de las tierras como de las semillas que se cultivan, y más aún, ante la falta de asesoría por parte de las autoridades, año con año, los campesinos de la Costa Grande provocan ecocidios al desechar al aire libre y sin ningún tratamiento previo los empaques y recipientes con residuos tóxicos.
Algunos campesinos dijeron para este medio de comunicación, que por si fuera poco, el ecocidio es provocado de manera sistémica; es decir, en varias etapas y de manera sostenida, puesto que al iniciar las labores de siembra, la mayor parte de los campesinos utilizan maíz “curado”, también llamado “mejorado” o “híbrido”, semilla que garantiza mejores cosechas.
Estas semillas mejoradas son tratadas con un producto químico (fungicida) llamado “Captan”, químico orgánico de contacto que actúa como protector y erradicante contra la mayoría de los hongos que afectan a los cultivos; aunque según los laboratorios es considerado “ligeramente tóxico”, afecta la flora y la fauna acuática en caso de no ser tratados adecuadamente.
Posterior a la siembra y para combatir las plagas del “cogollo” del maíz, son utilizados una gran variedad de productos químicos como el Parathión Metílico, Foley, Tamaron, entre otros, todos clasificados como altamente tóxicos.
Cabe decir que, por Norma Oficial, las casas que comerciales que se dedican a vender productos químicos están obligadas a brindar capacitación a sus clientes en el manejo de los mismos, incluso, se lanzó la propuesta para que los envases de los productos químicos fueran recolectados por estas casas comerciales, propuesta que ha quedado en “el aire”.
Contrario a las medidas que se han intentado implementar para frenar la contaminación derivada de los productos químicos utilizados en los diferentes cultivos; los campesinos indiscriminadamente tiran al cielo abierto todos los empaque tóxicos, desde costal de maíz “curado” hasta  los botes de insecticidas y de veneno para roedores.
Aunque algunos campesinos han adoptado rudimentarias medidas de protección al ambiente, al “enterrar” estos desechos en sus tierras de siembra, otros, la mayoría, de manera irresponsable los queman o los desechan en los caminos de terracería, desde donde son arrastrados por las lluvias y conducidos hasta los arroyos, y de ahí a los ríos, para finalmente llegar a los océanos.
Una vez en dentro de los cuerpos de agua, en los ríos sobre todo, aparte de que los desechos tóxicos matan todo tipo de peces, a la flora y la fauna, provocan severos daños en las personas que, sin saber del peligro que ello implica, acuden a las corrientes para sofocar el calor ya sea a tomar agua o bañarse, así como a lavar sus trates y ropa, ya que en las comunidades es muy frecuente que las mujeres acudan al río debido a que en sus hogares no tienen el servicio del agua.
Ante este grave problema, ni las direcciones de Ecología de los municipios ni algunas dependencias del estado, que deberían de cuidar el medio ambiente, no  orienta a los productores sobre el manejo de esta basura tóxica que afecta sus ríos y al ecosistema.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario