SOPA DE LETRAS

A la tinta de Noé Segura Salazar

MALA TARDE

Señoras y señores, con mucho pesar debemos de hablar de la fraudulenta expectativa que el empresario taurino le hizo al Patronato de la Feria de San Mateo Navidad y Año nuevo, puesto que la “puesta en escena” prometida estuvo muy lejos de lo que prometía el cartel para la tarde del 25 de diciembre.
De entrada la impuntualidad, segundo que aunque mucho se criticó la alternativa del “Acapulco” y pese al respaldo del maestro Mejía, teniendo de testigos de honor a Hilda y Gastón, nuestro paisano se mostró sumamente nervioso entrando en el primer tercio con un picador que puso la puya más de una ocasión y aunque colocó de mala manera una media estocada, fue suficiente para que el mejor astado de la ganadería hidalguense sucumbiera, no obstante el de la daga hizo que se levantara una vez más de la arena.
Desde una tarde antes del festejo, a esta oficina llegaron muchos comentarios en torno al “juez de plaza”, debido a que en demerito del prestigio de la plaza a nivel nacional –ya considerada por los críticos mediáticos de “Rincón Taurino” tanto del IPN como de la XEW y demás comunidad taurina ya es considerada como de segunda categoría-, ha venido siendo colocado por la misma empresa y a pesar de que en la noche del Teopancalaquis se hizo el respectivo comentario, la información simplemente no llegó.
El resultado no se hizo esperar, para cuando Manolo Mejía hizo acto de presencia con elegante traje de luces y en negro, fueron las únicas pinceladas de tauromaquia, rescatablemente el toro fue brindado al público cayendo “los machos” correctamente; a muchos su estilo les parece muy “frío” debido a su alta técnica, sin embargo, por más que se esforzó de sacarle “el máximo jugo”, el segundo de la tarde dio lo básico.
El tercero de la tarde fue para Hilda Tenorio, el astado de mayor peso -sobrepasó los 600 kilogramos- y en el previo sorteo fue para la nacida en Michoacán; mucha voluntad, incluso la matadora rodó por la arena, pero el toro tampoco dio el cárdeno tampoco dio el trapío necesario.
Lo peor para Hilda fue que no acertó en el tercer tercio de ninguna forma; una, dos hasta en tres ocasiones “pincho”, finalmente tuvo que escuchar el primer aviso, y después tuvo que definitivamente sacrificar al toro, mal y de malas, pues hasta los charros tuvieron que lidiar con el pesado semoviente ya de muerto.
 Venia “guerrerense”, pero para su mala fortuna después de salir de los toriles, se fue a impactar con el burladero, el toro se dañó las cervicales y quedó lesionado, nadie lo sacrificó el ignorante juez decidió que el rejoneador lo toreara, de nada sirvió los abucheos de la pequeña peña taurina de Chilpancingo y hasta de los villa melones.
Para cosas increíbles, hasta “los forcados” entraron “al quite”, ahora sí ya era una auténtica “pachanga”; con mucho valor, pero los de a pie fueron abatidos por el toro lesionado y para peor fortuna Gastón intentó torearlo una vez más; esto provocó en los tendidos fúricos debates por la falta de organización que se vio desde el gris paseíllo, sin que la banda de música tuviera las más mínimas nociones –por cierto habían prometido la banda de la marina-.
Haciendo un breve recuento, después de los desaguisados del Paseo del Pendón, el presidente del patronato hizo caso al comentario y ajustó “tuercas” en el Teopancalaquis, donde el recorrido salió muy bien, dándonos la razón de que debe ser el evento que incluso rescate al anuncio de la feria –y a toda ella-, incluso el presidente municipal quedó complacido luego de ser recibidos por el obispo Alejo.
El castillo de fuegos pirotécnicos a las afueras del templo de Santa María de la Asunción deleitó al respetable, como en todo no puede estar a salvo algún desperfecto, el cual causó un poco de pánico con una familia presente, ya casi al final, pero los elementos de Protección Civil municipal auxiliaron en todo momento.
Ya sólo queda que a pesar de los niveles de inseguridad que se vive en todo el país y que han llegado hasta noche tras noche a los pasillos y antros de las instalaciones, no empañe la feria en estos días previos al fin de año, el licenciado Tejeda tendrá que reforzar su equipo que ha reflejado una seria desorganización hasta en la falta de programas de mano, en fin, que todo sea por la fiesta más grande de Chilpancingo y que no se repitan estos desgarriates que llevan a una mala tarde.

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