REMATE

Firma de convenio de cobertura informática sobre la violencia

Por Norberto Cruz Cuevas

La mañana de ayer en la ciudad de México, empresarios de medios de comunicación, de radio, televisión y prensa escrita firmaron un convenio de cobertura informática de la violencia, dicho acuerdo tiene por objeto regular la información cotidiana que se difunde a millones de mexicanos que leen periódicos, que ven y escuchan la radio y la televisión, además de unificar criterios de medios de comunicación, para que estos a su vez instrumenten mecanismos que impidan la propagación del crimen organizado, así como definir criterios para salvaguardar la integridad de las victimas del crimen, establecer dispositivos de protección para los periodistas, además de promover el respeto a la legalidad, sumar el mayor numero de criterios de medios de información en relación a las averiguaciones ,sobre hechos delictivos en particular aquellos que se encuentren en las zonas de mayor conflicto es decir todo el territorio nacional.

En esta tarea de habrán de sumar 700 medios de comunicación, además de organismos empresariales, universidades, organizaciones de la sociedad civil, deportistas, fueron testigos de la firma del convenio la directora del Politécnico, Yoloxóchitl Bustamante; el rector de la UNAM, José Narro Robles; el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Raúl Plascencia; el presidente del Consejo Rector de Transparencia Mexicana, Federico Reyes Heroles, y el director general de Cinépolis, Alejandro Ramírez Magaña.
Uno de los retos que tienen frente a si los medios de comunicación es ver como se hacen las coberturas, la forma como se hace la nota periodística, además de limitar los hechos al ámbito estrictamente profesional, para impedir que los presuntos delincuentes se conviertan en “víctimas o héroes públicos”, se señala en el documento.
Y es que el tararea de informar sobre el combate a la delincuencia es una “tarea de conciencia, no legal ni constitucional, que no puede ni debe estar sujeta a compromisos o negociaciones.
La firma del convenio incluye la participación de 600 estaciones de radio, 92 periódicos y 23 revistas se comprometen a cumplir con este acuerdo que tiene entre sus criterios editoriales: condenar y rechazar la violencia motivada por la delincuencia organizada, enfatizar el impacto negativo que tiene y bajo ninguna circunstancia justificar “las acciones y los argumentos del crimen organizado y el terrorismo”.
Además de no convertirse en su vocero involuntario, evitar el lenguaje y la terminología empleadas por los delincuentes y abstenerse de usar inadecuadamente los términos jurídicos que compliquen la comprensión de los procesos judiciales.
Los medios participantes también se comprometen a no prejuzgar a los culpables y tener cuidado con la información de las autoridades, que en algunas ocasiones por mostrar una mayor eficacia presentan a los detenidos en condiciones que cancelan su presunción de inocencia.
Así como no prejuzgar culpables, cuidar a las víctimas y a los menores de edad; alentar la participación y denuncia ciudadana, no interferir en el combate a la delincuencia, proteger a los periodistas y solidarizarse ante cualquier amenaza o acción contra reporteros y medios.
Conscientes de que “hoy, la libertad de expresión está amenazada” y que sin ella “no hay democracia”, los medios que participan en el acuerdo alentarán la creación de un órgano ciudadano de observación que estará listo en un plazo no mayor a 30 días.
En el documento que avala, entre otros, el ex rector Juan Ramón de la Fuente, se reconoce como punto de partida que “el poder intimidatorio y corruptor criminal se ha constituido en una amenaza a las instituciones y prácticas que sustentan nuestra vida democrática” y las libertades fundamentales de la sociedad.
Ya que el terror que ha propagado la delincuencia organizada ha limitado mucho la libertad de expresión, de reunión y de tránsito en localidades importantes del país.
Se subraya, que según organismos internacionales, “México es uno de los países más riesgosos en ejercer el periodismo y la libertad de prensa por la presión de la delincuencia organizada” y que para lograr informar a la sociedad en este contexto de alto riesgo se requiere una estrategia que impida que el “terror vaya cancelando plazas informativas”.
Se parte del reconocimiento de que es responsabilidad “única y exclusiva del gobierno” cumplir y hacer cumplir la ley, del Poder Legislativo hacer las leyes que faciliten el uso constitucional de la fuerza pública, así como de los juzgadores procesar conforme a la ley.
Mientras que los medios “tenemos la responsabilidad de actuar con profesionalismo y preguntarnos de las implicaciones potenciales que tiene el manejo de la información”, por lo que las noticias deben apegarse fielmente a los hechos.
Entre los objetivos del acuerdo destaca el definir criterios para la “protección de la identidad de las víctimas de la violencia y promover el respeto a la legalidad, el combate a la impunidad y la participación ciudadana”.
Se busca sumar a más medios de comunicación, sobre todo los que trabajan en las zonas de mayor conflicto, para que todos cuenten con mecanismos que les impidan convertirse en “instrumentos involuntarios de la propaganda del crimen organizado”.
En los hechos reales la relación de medios de comunicación son la sociedad es otra y habremos de poner algunas muestras de lo que es la “chamba periodística cotidiana y como se hace lo que se denomina nota roja”.
Todos los medios de comunicación de buen nivel cuentan en sus espacios con la nota roja, esta constituye para algunos las metas en sus tirajes, a la nota roja son asignados varios reporteros, que por ahí de las 10 de la mañana se paran en las dependencias encargadas de salvaguardad la seguridad publica, llámense procuradurías, secretarias de seguridad publica, direcciones de la policía judicial, PGR entre otras cuando bien les va reciben por información dos tres hojas, que constituyen la parte informativa , en ellas se detallan los hechos delictivos de un día anterior, cada uno de estos espacios difícilmente tiene tres párrafos, por lo que la imaginación del reportero va más allá de lo surrealista, un buen reportero es capaz de hacer una novela con los escasos datos que aportan las autoridades, otro detalle son; las graficas, muchas de las veces son las propias autoridades en particular las del servicio forense las encargadas de permitir la toma de fotografías de homicidios violentos.
Una vez en la redacción son el jefe de información y redacción los que avalan las notas, las fotos y los pies de foto que se van a publicar, lo mismo para en los medios televisivos y la radio, en ocasiones los hechos delictivos son pasados con la realidad con la que acontece.
Un hecho real, es que la labor de los medios de comunicación solo plasma lo que la sociedad genera, los hechos que realiza el crimen organizado o bien la labor que hacen los hoy “enmascarados” Ejercito, Marina, Policía Federal, los medios de comunicación solo transmite su vivir diario, el cual se traduce en hechos violentos.
La firma de convenio entre medios de comunicación para informar sobre los hechos delictivos, no es la solución a los problemas de inseguridad que enfrenta México, se requiere de soluciones integrales, de reformas a la ley de mejorar las condiciones de vida de millones de mexicanos, de educación, de la impartición de los buenos valores, de hacer una sociedad más justa e equitativa, solo pondremos un ejemplo, del pago del desempeño de aquellas personas que se dedican al tema de la seguridad publica, mientras que un soldado del ejercito gana en promedio 10 mil pesos mensuales, un narco devenga tres veces más. Ambos enfrentan el mismo riesgo de las balas.

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