Agregó que el recuento de los daños con exactitud no lo tienen, “creemos que el daño que se generó fue con relación a la disminución de la atención médica del público y del enfermo en ese lapso, pero que los aparatos o equipo médico no sufrieron daño alguno. Solo en vacunas se hizo un inventario de todo el biológico que en ese lapso se mantuvo encerrado y se dio de baja por que estaba caducado, por lo que de ello se levantó un acta para enviarse a la jurisdicción sanitaria y esta a su vez la enviará a la Secretaría de Salud para su reposición.
Mencionó que otro de los daños es que en ese lapso se creó un estado de ansiedad, depresión, hastío e incertidumbre, entre la gente que participó en el conflicto, pero poco a poco se va a ir normalizando esta situación.
Otro de los aspectos que se pueden considerar como pérdidas son algunas vacunas que se echaron a perder en lo que duró el paro o bloqueo, y que en el aspecto económico no lo han revisado porque el equipo médico que han estado revisando está en buenas condiciones y que hasta ahora no ha habido alguna repercusión.
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