Leer o no leer.
¿Usted cuántos libros lee al año? Descontando el Libro Vaquero, la nota roja de los diarios, la sección deportiva o la página de fotos de los presumidos de “sociales”, podemos asegurarle que si usted lee uno o dos pertenece al privilegiado grupo de “eruditos” del bar que a todos presume su cultura “solapera”.
Nosotros conocemos a un funcionario del gobierno perredista de Guerrero asiduo a la librería Sanbonr’s. Lo mismo en el centro que en Calinda, el moreno dedica media hora a leer solapas de los libros. Luego presume su cultura. Poco, pero el amigo lee. Aunque sea las solapas. El hábito le cueste 24 pesos, precio de una taza de café.
Él, como usted, seguro pertenecen también al masivo y popular grupo de “la prole”. Son compañeros de Don Enrique Peña Nieto, lo mismo que de millones de mexicanos pobres que quisieran dinero para comprar un plato de frijoles, tortilla y un chile “de amor”, antes que comprar un libro o poder entrar al Sanborn’s.
Tomemos los datos que dieron a conocer los medios con respecto al efecto que tuvo Enrique Peña Nieto en su popularidad luego de no poder citar tres de los libros que le impactaron en su vida. Va la cita que revela nuestra realidad: somos un país con muchos pobres que no lee. Va el fusil.
“Los resultados de la Encuesta Nacional en Vivienda de Parametría levantada en enero, muestran que, lejos de lo esperado, el PRI mantiene la intención de voto (49% de preferencia efectiva).
Algunas de las razones que explican este fenómeno son primero: los niveles de información de los electores. El error en la FIL es conocido solamente por 45% de los mexicanos. De los enterados, un tercio son priistas (quienes difícilmente cambiarán su posición) y un cuarto independientes.
Días después de la FIL, el precandidato priista erró de nuevo al decir el monto del salario mínimo. Este incidente, que de nuevo despertó críticas y burlas, fue aún menos conocido por los mexicanos, con apenas 38%.
Al ver la reacción en redes sociales, muchos erraron al magnificar el alcance. Hacia finales del año pasado, únicamente 50% de los mexicanos decía haber utilizado, alguna vez, una computadora, mientras que apenas el 45% decía haber accedido a internet. De aquellos conectados a la red, más de un tercio (36%), comentó hacerlo de forma ocasional.
Segunda razón: uso de Internet. Poco más de la mitad (53%) de los encuestados en diciembre de 2011 declaró que nunca realizaba búsquedas de política, democracia o gobierno; mientras que seis de cada diez (58%), tampoco se interesaban en buscar información económica o de finanzas. Las búsquedas más populares y constantes en Internet son de entretenimiento, arte o música.
Tercera razón: quienes no votarán por Peña son precisamente los que más le critican; esto es, el ruido provocado por los errores del priista viene de quienes no votan ni se identifican con el tricolor, de ahí que no se haya movido el dato de preferencia.
Son más quienes justifican a Peña— considerando que el dislate se debió a un problema de recordación— que los que piensan que el precandidato priista no lee: 47% frente a 44%. El cruce por identidad partidista muestra que la mayor parte de quienes aducen a la memoria el error de Peña son priistas, los más críticos son panistas.
Cuarta razón: la preferencia por Peña, y su imagen, están ligadas a la evaluación de su gobierno. Una encuesta realizada en junio del año pasado —cuando Peña era todavía gobernador del Estado de México— revela que el 75% de los mexiquenses aprobaba el desempeño del mandatario, con apenas 23% de desaprobación (siendo con ello uno de los gobernadores con mejores niveles de aprobación del país).
Si el desempeño de Peña como gobernante es bueno para ocho de cada diez de sus gobernados, es probable que poco les importe a éstos si el entonces gobernador sea una lector asiduo”. Hasta aquí la cita o fusil.
Queda demostrado. Podemos ser lectores “solaperos”, no leer o ser ignorantes. Y podemos, a un tiempo, postularnos al cargo de elección popular que se nos antoje. Ahora entendemos porqué aparecieron en Acapulco decenas y decenas de extraños personajes que quieren un voto.
Si Peña puede ¿por qué ellos no?
TRASCENDIÓ
QUE el doctor Marco Antonio Terán Porcayo, aspirante a la candidatura del PRI a la presidencia municipal de Acapulco, fue “renunciado” fulminantemente de su cargo como director del Instituto Estatal de cancerología, la mañana de ayer. Aunque no se revela el motivo de su “renuncia”, se supone que tiene que ver con sus preferencias partidistas.
QUE en contraparte funcionarios del gabinete estatal de primer, segundo nivel y hasta del sótano, llevan a cabo eventos de proselitismo bajo el cobijo del Partido de la Revolución Democrática. A ellos se les privilegia con la “vista gorda”. ¿Nombres? Ésta misma semana el gobernador tendrá que reponer a mas de la mitad de sus colaboradores.
QUE Luis Walton Aburto, a quien le quieren “crecer los enanos del circo”, avanza cómodamente con preferencias electorales en Acapulco. Supera hasta tres a uno a sus compañeros aliancistas del PRD, quienes andan mas que alegres tapizando la ciudad con basura electoral que luego ahí quedará, y nadie se hará responsable de limpiar. Luis va en uno, le siguen Alberto López Rosas y David Jiménez Rumbo. Luego los demás se disputan las décimas y centésimas de cada punto.
QUE los sondeos en el PRI ponen a Fermín Alvarado, Marco Terán Porcayo y César Flores Maldonado en los primeros sitios. Luego a los demás en un fenómeno parecido al del PRD: disputan y patalean por décimas y centésimas de cada punto.
QUE al comparar a precandidatos de todos los partidos aparecen en éste orden: Walton, Fermín y ¡Zeferino Torreblanca! Vaya sorpresa.
QUE los datos corresponden al nivel de conocimiento del personaje. Las cifras cambian dramáticamente cuando se pregunta de las opiniones favorables o desfavorables de cada uno de ellos. Muchos son muy conocidos, pero negativamente.
NUMERALIA
1) La reducción de la pobreza en México se revirtió en los últimos años, con consecuencias que afectarán el futuro del país. Los niños constituyen casi la mitad de los 52 millones de mexicanos pobres, dato que indica que la pobreza podría tener consecuencias más duraderas que en otros países, sostuvo un nuevo informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
2) El gasto público destinado a atender necesidades sociales en México es una tercera parte del gasto promedio entre los países que pertenecen a ese organismo, indicó el informe Perspectivas OCDE: México, reformas para el cambio.
3) Además de escaso, respecto al promedio de las naciones de la OCDE, el gasto público para atender necesidades sociales no se distribuye mayoritariamente entre las personas con más necesidad de recibirlo para atender carencias. El reporte apuntó que el 20 por ciento de los más pobres apenas recibe 10 por ciento de las transferencias canalizadas a la reducción de la pobreza.
4) Según cifras oficiales, 52 millones de personas vivían en condición de pobreza en 2010. La población mexicana es relativamente joven. Por lo mismo, los niños constituyen casi la mitad de los pobres. Este dato indica que en México la pobreza podría tener consecuencias más duraderas que en otros países de la OCDE.
5) El problema de la pobreza en la tercera edad es una cuestión apremiante, dado que afecta a 30 por ciento de las personas de 75 años en adelante. 1.5 veces superior a la del conjunto de la población.
6) En el informe, la OCDE dedicó un capítulo a la agricultura, en el que mencionó que en México ese sector emplea a 13 por ciento de la población económicamente activa (actualmente de 49 millones de personas) y genera 3.8 por ciento del producto interno bruto.
PREGUNTAS QUE MATAN
¿Qué dice la ley cuando en dos poderes renuncian o piden licencia a su cargo mas de la mitad de sus integrantes, como sucederá ésta semana en el Poder Legislativo de Guerrero y en el gabinete del Poder Ejecutivo? ¿Quién responde ésta interrogante con la Constitución de Guerrero en la mano?
QUE CONSTE
“Los diputados locales nos merecemos las vacaciones de un mes”. Faustino Soto, diputado presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso Local de Guerrero.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario