MEMORÁNDUM

Por Gerardo Ruano Cástulo

*** ¿En riesgo, festejos de Vicente Guerrero?

Luego del recorte presupuestal que afectó de manera drástica al gasto corriente del municipio de Tixtla, el alcalde del lugar, Jorge Luis Campos Espíritu, se reunió con el gobierno del estado, para plantear que éste hecho, viene a limitar enormemente al Ayuntamiento, y que en ese sentido, existe la posibilidad de que los festejos por el natalicio del consumador de la Independencia, Vicente Guerrero Saldaña, sean demasiado austeros o que inclusive se suspendan, lo cual, para una entidad que lleva como lema “Mi patria es primero”, sería una cosa sumamente lamentable.

Así es. No se trata de una festividad más. Sino del reconocimiento al personaje histórico más emblemático de ésta tierra del sur. Desde la alta tribuna, en su momento, algún guerrerense propuso que durante la ceremonia del grito de la Independencia no se marginara al caudillo del sur. Muchos de los eventos políticos que desarrollan quienes han buscado ser gobernador, tienen su epicentro en Tixtla de Guerrero, en donde al pie del monumento del consumador de la independencia, expresan sus compromisos con el pueblo. Apelan a la historia y a la tenacidad de un héroe que luchó incansablemente para ver cristalizado el deseo de la libertad.

Desde la federación, y concretamente durante los sexenios panistas, se buscó reducir a su mínima expresión la figura de Vicente Guerrero. Eso no fue bien visto, por quienes saben que ésta tierra del sur ha dado mucho a la patria mexicana. Muchos hombres y mujeres se sumaron a la causa de la Independencia. El estado fue el bastión clave para la concretización de éste hecho histórico y sumamente memorable.

Fue en Chilpancingo donde se dio lectura a los sentimientos de la Nación tras haberse instalado el primer congreso de Anáhuac. Fue en Iguala el lugar donde se creó la insignia de las tres garantías. Y fue en Tixtla, desde donde surgió el caudillo que habría que conducir al ejército independentista hacia la ruta del triunfo y con ello la concretización de un país libre. El aporte de la entidad suriana para el país es parte de los discursos cotidianos de nuestros políticos.

Hoy tienen enfrente un buen reto. En medio de las limitaciones económicas sería mezquino olvidar la obra de Vicente Guerrero Saldaña. Eso lo sabe perfectamente el alcalde de Tixtla, Jorge Luis Campos Espíritu, quien después del recorte presupuestal ha tomado cartas en el asunto, tocando puertas en el gobierno del estado, en aras de cristalizar unos festejos a la altura del consumador de la independencia.

Es un hecho, que después de la disminución drástica que ha sufrido el presupuesto de su municipio, es complicado que pueda tener la capacidad para organizar unos festejos de una gran magnitud, Ya se habla de eventos que podrían ser demasiado austeros. Y en el último de los casos, que hasta podrían ser suspendidos, en función de que el municipio tampoco puede dejar de pagar los salarios de sus trabajadores, que por donde se vea, son completamente sagrados.

El presidente municipal tiene enfrente el reto de administrar adecuadamente los escasos recursos para no dejar desamparados a quienes prestan sus servicios por medio del ayuntamiento al pueblo de Tixtla. Lo conveniente aquí, en función de lo que representa el General Vicente Guerrero Saldaña, es que el Gobierno del Estado pudiera ser subsidiario y solidario, a efecto de que el 9 de agosto sea un día con eventos dignos de un héroe que ha dejado un gran ejemplo al país.

Ante la enorme crisis de valores que estamos viviendo. Hoy más que nunca, es importante recordar y con mucho ánimo, aquella frase que debe ser guía para muchos niños y adolescentes: “Mi patria es Primero”. No es pues una simple fiesta. Tiene un enorme valor histórico. Esa es la cuestión.

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