PAREDÓN

Por Ramiro Arturo Barrera Moreno

Si a usted estimado lector (a) le suena el nombre de Moisés Cortés Avendaño sabrá que es Subsecretario de Desarrollo Urbano del municipio de Chilpancingo. Lo visité este día martes 31 de julio por que un día antes envió a mi domicilio el oficio de requerimiento No. SSDU-162/2012 a nombre de María de los Ángeles (sin especificar apellidos) donde le otorgan veinticuatro horas para que acuda a sus oficinas y en caso de no hacerlo se hará acreedora a terribles penas que marcan las leyes y reglamentos municipales.  Aclaro que las escrituras de mi casa y todos los pagos de predial, licencia de construcción de una ampliación de vivienda y servicios están a mi nombre, pero como  María de los Ángeles se llama mi esposa y la pobre estaba al borde de un colapso acudí al palacio municipal para resolver este asunto.

Al llegar a las oficinas del señor subsecretario, me indicaron esperar ya que esos delicadísimos asuntos el caballero los resuelve personalmente.Mientras en varios escritorios media docena de empleados platican, chacotean y hacen de todo menos trabajar. Le pregunto a la secretaria: ¿No será posible que otra persona me atienda? Seria me contesta: “no solo él le puede resolver”.

Resignado espero pacientemente. Cuando por fin me atiende el alto funcionario municipal;con una fotografía en la mano publicada en un diario local, me dice que por esa denuncia periodística  me hago acreedor de una multa de $1,772.40 (un mil setecientos setenta y dos pesos con cuarenta centavos), el motivo de la sanción es por tener en la banqueta de mi domicilio un poco de arena y escombro.

No me asombra ser notificado para multarme, lo que me admira es que un periódico local haya publicado una fotografía de mi banqueta un día anterior e inmediatamente  hicieron llegar la notificación de sanción a nombre de mi esposa. ¿Cómo  supieron su nombre? ¿Por qué tanta rapidez para castigarla? ¿Por qué ya tenía el periódico en su escritorio donde aparece la fotografía de mi banqueta con la arena y el escombro?

Todo me hace pensar que es un “compló” en nuestra contra, pero lo que mas me sorprende es la argumentación del sr. Moisés Cortés. Subsecretario del Ayuntamiento: “mis fuentes de información, son los periódicos, diariamente compro varios y así atiendo las denuncias públicas. Solo tengo cuatro inspectores que no se dan abasto y la ciudad es muy grande”.

Le comento que si de delatar se trata, voy a denunciar en esta columna “Paredón” del  diario Pueblo Guerrero, todas las banquetas obstruidas de la ciudad y las anomalías relativas al desarrollo urbano. Lo cual me agradece y ordena a un subalterno que desde mañana le compre también el diario Pueblo para que esté enterado.

Recibo por contestación un consejo: “retira tu escombro inmediatamente y tráeme una fotografía, así te bajo el monto de la multa… Aquí no nos interesan las multas, muchas personas vienen a solicitar licencias o permisos y les decimos te cuesta tanto, pero ¿cuanto quieres pagar?, así ayudamos a la gente”. Me pregunto para mis adentros ¿a este sujeto en que momento le di permiso de tutearme?

Pensándolo bien llego a la conclusión de que no voy a ponerme a hacer la chamba de esos haraganes, gandules y perezosos, tengo cosas mas interesantes que hacer, como ver las Olimpiadas de Londres y admirarme de  como los chinos y los gringos ganan medallas por toneladas, mientras la mayoría de  nuestros paisanos atletas mexinacos hacen el ridículo.

Temeroso, asustado y desconfiado voy a retirar el escombro de mi banqueta, no sea que mañana mismo se me notifique el fusilamiento ipso facto de mi mujer o alguna otra terrible pena a la que seamos condenados por esos eficientísimos servidores públicos. Espero lea esta columna mi amigo Tulio Samuel Pérez Calvo, para que vea la clase de colaboradores que tiene.

 Me comprometo a llevarle personalmente este comentario a Mario Moreno Arcos, para que ahora que tome posesión como presidente municipal, corrija estas situaciones.

Correo electrónico: ramarbamor@hotmail.com