OPINIÓN

Por  Manuel Tello Zapata.

De comparecencias

En lugar de asistir personalmente para ejercer su derecho de aclarar dudas y presentar documentos que comprueben el buen uso de los recursos públicos que estuvieron en sus manos, los ex funcionarios del Gobierno que encabezó el Contador zeferino Torreblanca Galindo, contrataron a uno de los bufetes jurídicos más caros de la ciudad de México, para que uno de sus abogados los representara en la comparecencia ante la Contraloría General del Estado.

La dependencia detectó diversas irregularidades en la construcción del Centro de Atención Ciudadana en Acapulco, comenzando porque el ex gobernador, de manera indebida, entregó los recursos para su construcción, a la Secretaría de Finanzas (sus cuates más cercanos pues), y no a la de Obras Públicas como debió haberse hecho por ley.

El que nada debe nada teme dice el refrán. Evidentemente: si los ex funcionarios gastan tanto en su defensa es porque tienen cola que les pisen. De otra forma se hubiesen presentado personalmente sin gastar tanto dinero para que su abogado viniera a proferir amenazas a granel con declaraciones periodísticas, en lugar de establecer una defensa jurídica y veraz.

Obviamente, el Contralor General Julio César Hernández Martínez quedó muerto ¡Pero de risa! Ante las bravatas del abogado Alejandro Sodi; porque las cuentas hablan y los hechos son más contundentes que las palabras. Ya veremos como termina todo esto.

¿GOBERNADOR DE DIEZ?

Con un paso de trabajo asombroso, el Gobernador del Estado Ángel Aguirre Rivero continúa desplegando todo un programa de trabajo que le dará a nuestra entidad otro rostro: en un período recortado, pero que alcanza cuando el que encabeza los esfuerzos del gobierno pone el ejemplo.

Los ejes principales sobre los que camina el gobierno pretenden darle a los guerrerenses, modernas vías de comunicación; especialmente en las ciudades como Acapulco, donde se debe recuperar el prestigio de atracción turística a nivel internacional.

Al mismo tiempo, se busca desarrollar la ganadería y la agricultura, temas que el Gobernador conoce muy bien, algo que demostró ayer al inaugurar en Acapulco la muestra de ganado Suizo, y durante los eventos que encabezó con el Secretario federal de Agricultura, Francisco Mayorga, donde detalló el apoyo que se está dando a nuestros principales cultivos como la jamaica, el tamarindo, etc..

Se busca también iniciar un proceso de industrialización, dando el primer paso con la reactivación del Valle de El Ocotito, donde se están asentando diversas industrias, con el objeto de mostrar al mundo que Guerrero es tierra buena para la atracción del capital, pese a problemas como la inseguridad y la cerrazón de los “lucradores” sociales.

En el aspecto educativo, el Gobernador pretende lograr nuevos acuerdos en conjunto con las fuerzas del magisterio; acuerdos que traigan a Guerrero un modelo educativo más realista y justo. Se atienden problemas ancestrales y viejos vicios que se arrastran desde siempre. Algo bueno debe salir de estos esfuerzos.

La distribución gratuita de uniformes escolares a todos los alumnos de nivel básico y de útiles escolares, es un hecho que llegó para quedarse. Lástima que no faltan malos maestros y directores que lucran con estos apoyos.

Nunca como ahora se están ejecutando programas de desarrollo social en beneficio de las clases más desprotegidas como las personas de la tercera edad, madres solteras y discapacitados. En este sentido se aprecia el gran trabajo que hace la Señora Laura del Rocío Herrera, que ha entregado miles de apoyos en despensas, ropa, cursos de capacitación, aparatos ortopédicos, material de construcción, etc..

Ángel Aguirre Rivero es un gobernador bien informado. Eso le permite conocer a tiempo los problemas coyunturales para resolverlos como van saliendo y cuando estos rebasan a sus principales colaboradores. Se le vé apoyando a alumnos rechazados en Ayotzinapa por los vándalos que gobiernan esa escuela; interviniendo para que se libere a estudiantes detenidos bajo acusaciones falsas de delincuencia organizada; dialogando con los maestros de Acapulco, gestionando recursos en la ciudad de México, inaugurando obras en los municipios, etc..

Aguirre Rivero no se pone límites como gobernador. Hace a un lado las diferencias ideológicas para trabajar como buenos servidores públicos, con todos los presidentes municipales, diputados, etc., sin hacer distingo alguno por colores partidistas, algo que pueden no entender los perredistas más radicales por sus grandes limitantes ideológicos. Esta actitud del mandatario guerrerense, no traiciona en forma alguna las banderas de la izquierda, simplemente son un ejemplo de altura de miras, madurez y modernidad política.

manueltello2002@yahoo.com