OPINION

Por  Manuel Tello Zapata.
Al rescate de Acapulco

Nuevamente, el “brazo armado” del figueroismo, Rubén Figueroa Smutny, alza la voz en contra de su odiado enemigo, Manuel Añorve Baños, para pedirle que renuncie al cargo de secretario de la Comisión de Vigilancia en la cámara de diputados, ya que según él: es una burla y una vergüenza que después de haber dejado en quiebra la comuna de Acapulco, (Añorve) permanezca en esa comisión que debe vigilar que no haya desfalcos, desviación de recursos y corrupción en las cuentas públicas de los ayuntamientos.

Estamos de acuerdo con el júnior; pero como que no le queda a este político buscapleitos señalar con dedo flamígero a su correligionario. Porque de todos es sabido que la familia Figueroa se enriqueció a manos llenas gracias a la corrupción y el tráfico de influencias.

Es necesario que las instancias correspondientes investiguen a fondo las cuentas públicas de Acapulco, para que se castigue a quienes desviaron los recursos del pueblo para campañas políticas o para su peculio personal. El Gobernador del Estado, Ángel Aguirre Rivero, está haciendo esfuerzos extraordinarios para sacar adelante al puerto; en ese marco se da una alianza firme con el Alcalde Luis Walton Aburto, para conseguir recursos suficientes que permitan la operatividad de nuestro bello puerto y se pueda sacar al toro de la barranca.

Sin embargo, no se vale que luego de salvar a la comuna porteña con esfuerzos de los tres niveles de gobierno, se dé borrón y cuenta nueva, cuando quien destruyó no solo al puerto, sino al PRI: Manuel Añorve Baños, quien hoy está escondido bajo el sarape de su patrón Manlio Fabio Beltrones, es el principal responsable del saqueo, lo que está a ojos vistos, y debe rendir cuentas claras.

IEE: NUEVOS CONSEJEROS

Mañana viernes por la mañana se dará el cambio de Consejeros en el Instituto estatal Electoral y recibirá la estafeta el nuevo Presidente ratificado por el TRIFE: José Guadalupe Román Salgado. De esta forma, concluirá un exitoso período de trabajo que encabezó el Consejero Presidente César Gustavo Ramos Castro, donde también tuvo una destacada participación el Consejero Arturo Pacheco Bedoya.

César Ramos entregará buenas cuentas, ya que les tocó organizar los procesos electorales del 2005, 2008, 2011 y 2012. En todas se hizo un buen trabajo y la experiencia adquirida en cada elección se fue capitalizando para mejorar en el siguiente proceso, dejando el prestigio del IEEGRO, en su nivel más alto.

Tanto César Ramos Castro como Arturo Pacheco Bedoya merecen ser tomados en cuenta para ser Magistrados en el Tribunal Estatal Electoral. Cuentan con el perfil profesional y académico requerido y dejan una buena trayectoria como Consejeros electorales. Ramos Castro laboró durante varios años en el Tribunal desde 1996, fungiendo como Juez.

No faltarán quienes despotriquen de ellos por aquella entrega de cinco diputaciones plurinominales al PRD en la última elección. Sin embargo, el Instituto Electoral actuó apegado a Derecho y procedía esa distribución de “pluris”. Quien metió la pata fue el Tribunal Estatal Electoral cuyos Magistrados, que tienen que ver en la parte judicial del proceso, ratificaron dichas posiciones para el PRD, que luego fueron desechadas por el TRIFE.

ESTUDIANTES “CHAMAQUEADOS”

Todo el mundo corrió ayer a esconderse en Chilpancingo cuando se supo que los estudiantes de Ayotzinapa y sus socios de diversas organizaciones harían una marcha. Conociendo sus negros antecedentes, la gente prefirió no salir de sus casas para evitar ser objeto de alguna agresión por parte de estos sujetos, que suelen desequilibrarse y perder el sano juicio en no pocas ocasiones.

Sin embargo, ayer no pasó nada fuera de lo normal. La marcha transcurrió sin ningún incidente y hasta fue un evento aburrido, sobre todo para los participantes, acostumbrados a hacer de las suyas. Salvo unas pintas que hicieron en el cuartel de la Policía Federal Preventiva, los “Ayotzivándalos” se portaron bien y por la noche se retiraron a su cuartel general, a bordo de 19 autobuses que secuestraron para transportarse cómodamente y de gorra.

Mucho tuvo que ver en la excesiva paz de la marcha, que los de Ayotzinapa fueron “chamaqueados” por el Gobierno del Estado y el Congreso local, donde se suspendieron las labores para evitar cualquier desaguisado. Los marchistas encontraron un palacio de gobierno y la sede del poder legislativo… Totalmente vacíos ¡Oh decepción!