Chilpancingo, Gro. 24 de Marzo / ANG.- Durante la celebración del domingo de ramos, que marca el inicio de la Semana Santa para los católicos, una de las principales peticiones de la ciudadanía en Chilpancingo fue la recuperación de la paz social y el cese a la violencia que prevalece en la entidad.
Desde tempranas horas miles de feligreses se dieron cita en la glorieta de Unidos por Guerrero, de donde marcharon por la Avenida Miguel Alemán hasta llegar a la Plaza Cívica Primer Congreso de Anáhuac y dirigirse a la catedral de Asunción de María a donde acudieron para bendecir sus palmas.
Acto similar realizaron los locatarios del mercado municipal “Baltazar R. Leyva Mancilla”
, quienes se reunieron en el Parque Margarita Maza de Juárez y se dirigieron hasta las instalaciones de este centro de abastos para realizar la bendición de sus palmas en el lugar donde se encuentra la Virgen de Guadalupe.
Esta acción simboliza la entrada de Jesús de Nazaret a la ciudad de Jerusalén hace más de dos mil años según lo explica el evangelio, y forma parte de las actividades que realizan los católicos en el marco de la Semana Santa que representa la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
El sacerdote, Víctor Manuel Aguilera Gómez, vicario general de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa dio a conocer que este año hubo mayor participación de los fieles católicos, y aseguró que muchos de los feligreses le externaron la idea de orar por que regrese la paz a la ciudad.
Reconoció que actualmente el estado de Guerrero está pasando por una situación muy complicada en materia de seguridad, lo que ha generado la reacción de la población quienes están pidiendo a través de diferentes medios el cese a la violencia e inseguridad.
Indicó que la visita de los miles y miles de fieles católicos que asistieron a las diferentes catedrales de la ciudad para bendecir sus ramos, significa que la ciudadanía aún tiene la esperanza de recuperar la tranquilidad y darle fin a los hechos violentos que diariamente se registran en todo el estado.
Desde el día sábado muchas personas se instalaron en los alrededores de las iglesias de la capital para comercializar palmas tejidas que iban desde los 20 hasta los 60 pesos cada una, dependiendo del tamaño y la elaboración que tenían.
Así como en la capital, en todos los municipios de Guerrero comenzaron a conmemorar la Semana Santa, siendo la ciudad de Taxco donde se tiene un mayor arraigo, atrayendo incluso a turistas que arriban a ese lugar para apreciar la pasión de los fieles que se caracteriza por sus severas penitencias. (ANG)
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