*** Ángel Aguirre; La razón por encima de la fuerza pública
Si las estadísticas indican que más del 90 por ciento de las personas son reactivas. Que son propensas a buscar los supuestos errores y demeritar los aciertos de los demás. Es completamente natural, que después de la firma de acuerdos entre el Gobierno del Estado y la CETEG, existan quienes quieran aprovechar la ocasión para intentar desacreditar el accionar del Gobernador Ángel Aguirre Rivero quien al final de cuentas, lo que ha pretendido desde que inicio su gobierno, es dar la bienvenida a todas aquellas aportaciones que vengan a mejorar la calidad de vida de los Guerrerenses. Por eso, es saludable, que en medio de la turbulencia, haya prevalecido el dialogo. Y la razón por encima de la violencia o el uso de la fuerza.
Así es. Los detractores del mandatario estatal se han dado vuelo aduciendo que debió haber utilizado la fuerza pública para desalojar a los Cetegistas que bloquearon la autopista del sol por nueve horas el pasado viernes, a efecto de poner fin al conflicto magisterial. Uno de ellos, el legislador local, Rubén Figueroa Smutny, quien volvió a la carga desde su cuenta de Facebook. Aunque en su papel de diputado, no se ha sabido que haya hecho algo para ayudar en la solución del problema. Y lo que hoy haría, si hubiera habido desalojo, seguramente, es etiquetar al gobierno de Ángel Aguirre como represor. Ya se sabe cómo se las gasta el junior.
Lo ridículo del asunto, es que todavía existan quienes crean que las cosas se arreglan con producto de gallina. ¿Entonces qué dirá el legislador Smutny de la vida de Gandhi o del mismo Jesucristo, que privilegiaron la paz y la armonía social? Y que impacto han tenido en el mundo.
Hoy otro grupo de detractores del gobernador lo cuestionan asegurando que los maestros se salieron con la suya. No se repara en ver, que un violento desalojo no habría garantizado el fin del conflicto magisterial y mucho menos significado la tranquilidad de la gente.
El que la violencia no haya hecho su aparición, por cómo han estado las cosas en la entidad suriana, es una magnífica noticia. Lo que debe seguir a éste avance, es la ampliación de los acuerdos hasta el terreno de comprometer a los cetegistas a respetar los derechos de los demás. Y al mismo tiempo, la autoridad mantener abiertas todas las vías que faciliten el dialogo, no solamente con los maestros, sino con todos los sectores de la sociedad.
Sería un error olvidar el cúmulo de daños provocado por las movilizaciones de los cetegistas. De ahí que los acuerdos también deben aterrizar en beneficio de la colectividad. No hacerlo, sería como aceptar que esa es la vía reconocida en la entidad para lograr negociar con el gobierno.
Por no haber hecho uso de la fuerza pública, hoy sus detractores cuestionan al gobernador Ángel Aguirre Rivero. Completamente natural ante la cantidad de gente reactiva que existe. Y más, por los intereses que siempre están en juego. Nada más, que ahora las cosas están en un punto, en donde se debe sacar algo bueno de todo éste conflicto. Y que ojalá, sea de beneficio para la gente.
¿Sabe usted como estarían las cosas hoy, si hubiese habido un desalojo? Algunos se estarían dando un festín hablando de represión y excesos. Otros estarían justificando el uso de la fuerza pública en apego a la ley. Pero al final, todos sabemos que con la violencia no gana nadie. El arma más poderosa, es el uso de la razón. No es casual, que muchos autores de libros hayan dedicado muchas páginas para hablar del trabajo más pesado del planeta: “pensar”. Esto no es cosa de amígalas. Esa es la cuestión.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario