Zeferino Torreblanca debe regresar; pero lo que se llevó
Lo que he dicho una y muchas veces que los hay políticos sin escrúpulos, inmorales, falaces, corruptos y saqueadores a quienes no les mueve el interés de la colectividad, a quienes dicen representar, sino el interés personal, y uno de esos preclaros ejemplos es ni más ni menos que el ex gobernador de Guerrero Zeferino Torreblanca Galindo, quien amenaza al sufrido pueblo suriano con regresar, pero no lo que se llevó (que según dicen los que no lo quieren son muchos miles de millones de pesos del erario público), sino regresar al apasionante mundo de la política, actividad muy bondadosa para Torreblanca Galindo pues le ha permitido salir de la espantosa quiebra financiera en la que estaba sumido, pero también para volver a ocupar un lugar en la envidiable lista de millonarios en Acapulco, Guerrero y México, desde que fue alcalde de Acapulco y posteriormente como mandatario estatal, el peor de los últimos tiempos, para desgracia de quienes habitamos en estas benditas tierras surianas…
Torreblanca Galindo es un verdadero “caradura” al anunciar su retorno a donde no es ni será bien recibido por el electorado, pues sabe perfectamente que las autoridades competentes le siguen los pasos cual vil pillo de siete suelas, específicamente la Contraloría General del Estado, misma que en agosto de 2012 inició procesos administrativos y penales en su contra -de Zeferino Torreblanca-y cinco de sus principales colaboradores, por presuntas irregularidades en el manejo de mil 038 millones 674 mil 837 pesos…En el periodo señalado, el contralor del estado Julio César Hernández Martínez informó que luego de las investigaciones realizadas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) a las cuentas públicas de la administración zeferinista, se descubrieron varias irregularidades de comprobación de diversas obras de su nebuloso gobierno…Entre sus colaboradores carentes de probidad y honradez que también serán sujetos de sanciones administrativas y penales son el ex secretario de Finanzas y Administración, Ricardo Ernesto Cabrera Morín; el ex subsecretario de Egresos, José Antonio Bajos Valverde; la ex directora de Adquisiciones, Patricia Margarita Díaz Hernández, así como Enrique Pasta Muñuzuri y Sandra Luz Flores Jiménez, quienes –junto con su jefe máximo ZTG- desde hace varios meses deberían estar recluidos en la cárcel purgando merecida condena por malversación de recursos públicos y mal uso de la función pública…En tiempo y forma el Contralor estatal, Julio César Hernández Martínez, informó a la población guerrerense que el número del expediente bajo el que la ASF realizó las auditorias correspondientes es el 026/2012, que fue expedido el 21 de marzo de 2012, asentándose que las principales observaciones se detectaron en la Dirección de Adquisiciones y Servicios Generales de la Secretaría de Finanzas y Administración del Gobierno de Estado, en la obra de construcción del Centro de Atención Ciudadana, el cual se erigiría en el puerto de Acapulco con el propósito de concentrar ahí todas las dependencias gubernamentales que funcionan en esa ciudad puerto, obra que finalmente fue todo un escandaloso fraude mega millonario…Si de verdad en México –como lo aseguró el Presidente Enrique Peña Nieto- se acabaron los “intocables”, pues qué espera la Procuraduría General de la República (PGR) para poner a buen resguardo a este ex gobernador de Guerrero y contlapaches que lo acompañan, por haber presuntamente incurrido en la comisión del delito de peculado en perjuicio del paupérrimo erario de nuestra entidad, cuyos habitantes con voz fuerte y clara le decimos a ZTG que SÍ, que regrese…pero lo que se llevó y que nos pertenece a todos los guerrerenses. ¡Eso es todo!.
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