Chilpancingo, Gro. 25 de julio / ANG.- Tras haber suspendido la huelga de hambre que inició la mañana del miércoles por complicaciones médicas, Miguel Salgado Bautista, ex integrante de la Liga Agraria Revolucionaria del Sur Emiliano Zapata (LARSEZ), marchó encadenado de Palacio de Gobierno a Casa Guerrero para exigir ser atendido por las autoridades estatales.
Esta persona, que padece de diabetes, levantó su huelga de hambre a las nueve de la noche del miércoles, mismo día en que inició con esta acción de protesta, esto porque el nivel de su glucosa aumentó de manera considerable por la falta de alimentos y el frio, lo que pudo llevarlo a un coma diabético.
Sin embargo, para este jueves a las 11 de la mañana regresó a Palacio de Gobierno, de donde inició una marcha hacia Casa Guerrero, durante la caminata se enredó una cadena que sujetaban por los extremos dos personas que lo acompañaban para auxiliarlo en caso de que desmayara.
Salgado Bautista arribó a la puerta uno de Casa Guerrero, donde colocó cartulinas en las que exigía una audiencia con el gobernador del estado, Ángel Aguirre Rivero y castigo para Raymundo Velásquez Flores, dirigente de la LARSEZ, a quien acusa de no entregar material para viviendas a 12 familias.
En un primer momento, la única demanda del inconforme era la intervención del gobernador para presionar al dirigente indígena a entregar 240 láminas galvanizados por las que pagó 2 mil 400 pesos y que le debió entregar hace dos meses, además de la reparación de su vehículo que utilizaron para las marchas de la LARSEZ. Pero para este jueves las demandas ya habían incrementado, pues además solicitaba la entrega de material, como cemento, varilla y grava para la construcción de una “vivienda digna” equivalente a 80 mil pesos, además de un apoyo económico de 100 mil pesos para la instalación de un comedor integral para personas diabéticas.
En cuanto a la reparación de su vehículo, aseguró que se necesitan 40 mil pesos para ingresarlo a un taller mecánico y poder repararlo, señalando que sufrió muchos daños durante las marchas que organizó la LARSEZ en algunos municipios de Guerrero.
“La verdad tiene daños importantes, no es una camioneta cualquiera, son 40 mil pesos lo que estoy pidiendo para su reparación, se le vaciaron los amortiguadores, las llantas se desgastaron en un 50 por ciento, son llantas gruesas, cuestan cerca de seis mil pesos cada una”.
Salgado Bautista dijo que si las autoridades estatales no lo atendían se trasladaría este viernes a la Ciudad de México para buscar una solución en las instancias federales y solicitar también la intervención de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), pues a pesar de que puso en riesgo su salud no fue atendido. ANG
No hay comentarios.:
Publicar un comentario