OPINION

Por Manuel Tello Zapata
Que se vaya mexhidro

El Senador guerrerense Sofío Ramírez Hernández, Presidente de la Comisión de Atención a Zonas Marginadas de la cámara alta, solicitó ante ese poder legislativo mediante un punto de acuerdo, que se cancele el permiso de operación a la empresa italo-mexicana MEXHIDRO, por los graves daños que ha ocasionado al entorno ecológico de la presa El Gallo, ubicada en Cutzamala de Pinzón. El punto de acuerdo deja entrever además, una seria violación al artículo 27 constitucional que garantiza como facultad exclusiva de la nación: generar, conducir, transformar, distribuir y abastecer de energía eléctrica que tenga por objeto la prestación del servicio público, por lo que no se otorgarán concesiones a los particulares.
El Senador Ramírez Hernández ha seguido muy de cerca este problema, manteniendo contacto permanente con el Gobernador del Estado Ángel Aguirre Rivero, las autoridades y ciudadanía de Cutzamala, por lo que una vez confirmado el deterioro ecológico que genera MEXIDRO en la presa de El Gallo, decidió apoyar a fondo, solicitando no solo la reparación de los daños, sino que se vaya esta empresa para evitar que acabe con el entorno ecológico de esa zona.
El punto de acuerdo asegura que empresas privadas como MEXIDRO e IBERDROLA, entre otras, desde el sexenio pasado satisfacen el 50% del consumo nacional de energía eléctrica en el país, con lo que se está privatizando este servicio contraviniendo a la Constitución. Es por eso que solicita al Senado exhorte a la Secretaría de Energía para que a través de la Comisión Reguladora de Energía, cancele el permiso E/130/AUT/99 a la empresa MEXHIDRO, por no cumplir con las medidas ambientales que han afectado a la población de Cutzamala.
UNIDAD UNIVERSITARIA
Al cumplirse los primeros cien días de gobierno universitario, el Doctor Javier Saldaña Almazán, Rector de la Universidad Autónoma de Guerrero puede decir que su administración lleva un buen paso. La gestión de recursos se mantiene firme y se avanza en el desarrollo académico para fortalecer la presencia de la máxima casa de estudios guerrerense, en el entorno nacional.
Sin embargo, lo más importante de estos cien días fue constatar que la unidad en torno al proyecto político y académico del Rector se mantiene intacto, con los que las corrientes al interior de la UAG están dando una muestra de madurez, al respetar las facultades que le otorga la ley orgánica al Rector para la designación de los funcionarios que lo apoyan en su administración, algo que podía convertirse en una rebatinga si los líderes hubieran antepuesto los interese personales o de grupo, a los de la institución.
Esta situación de estabilidad política le permitirá a Saldaña Almazán poner toda su atención en asuntos no menos importantes, como el registro a las unidades académicas de los alumnos de nuevo ingreso, donde se calcula que serán rechazados más de mil 200 estudiantes. También la gestión de recursos, tarea permanente para el Rector, podrá continuar sin altibajos ante las instancias correspondientes.
¿COMUNITARIAS MIXTAS?
Un factor que inicialmente parecía ser la solución más adecuada a la inseguridad que se vive en zonas rurales de Guerrero: las policías comunitarias, parece convertirse hoy en un problema que se puede agravar si las autoridades de la federación no proceden conforme a derecho, para no permitir más violaciones a la Constitución y a la vida normal de los guerrerenses.
En la Costa Chica, las comunitarias tienen antecedentes de buen origen porque partieron de los usos y costumbres de la población indígena, y de la corrupción en que siempre han incurrido en esa región las autoridades que persiguen y castigan el delito. Sin embargo, actualmente este sistema de comunitarios se está pervirtiendo con las actitudes venales de algunos comandantes, que deben ser devueltos a los límites que les impone la ley.
El peor de los casos se está dando en la Costa Grande, donde ya todo el mundo se ha dado cuenta de la simbiosis que existe entre los grupos “comunitarios” que han ido surgiendo en los últimos días, con la delincuencia organizada. Es necesario que el Ejército investigue esta situación para que actúe en consecuencia desarmando a estos grupos “mixtos”, antes de que las cosas se pongan peor.