OPINION

Por Manuel Tello Zapata
Se pondrá buena hoy la sesión

Todo se encuentra listo para que este martes, el Congreso del Estado celebre una sesión donde el punto principal es la renovación de la Mesa Directiva, donde hay dos propuestas: que sea la fracción del PRI quien tenga la presidencia, o que el PRD mantenga ese cargo administrativo, cambiando solamente al diputado que hoy la ostenta. Existen dos posiciones totalmente polarizadas: los del PRI exigen que se les entregue la presidencia de la Mesa Directiva, porque en estos tiempos no debe haber hegemonías y la democracia debe privilegiar los acuerdos, antes que la imposición.
En la fracción perredista, que junto con sus aliados del Movimiento Ciudadano y Partido del Trabajo, consideran que el PRI se muerde la lengua cuando habla de democracia; porque ellos siempre impusieron sus criterios cuando tenían la mayoría. Aceptan que la democracia es construcción de acuerdos, pero cuando estos no se dan, es la mayoría la que manda… en toda democracia. No les faltan dosis de razón.
 Para evitar un choque de trenes, el Presidente de la comisión de gobierno, Bernardo Ortega Jiménez, inició una ronda de negociaciones con el PRI buscando llegar a un acuerdo constructivo, pero la fracción del PRD que tienen la mayoría, ya cuenta con un candidato para relevar a Antonio Gaspar en la Mesa Directiva y si se dan las condiciones, van a “mayoritear” la sesión.
Sin embargo, en la planilla del PRD existen dos diputados de abierta línea añorvista: Germán Farías y Abelina López (esta última se nota que fuma de la buena al más puro estilo Fox, porque un día dice una cosa y al otro cambia de opinión). Estos legisladores supuestamente perredistas, se han pronunciado porque se le entregue al PRI la mesa directiva en aras de democratizar la vida legislativa local.
Se ignora si estos dos votos a favor del PRI podrán inclinar la balanza hacia el tricolor, pero por lo pronto ya se sabe que el nuevo Presidente de la Mesa Directiva saldrá de dos nombres: Héctor Astudillo Flores por el PRI, y Alejandro Arcos por el PRD (la mesa directiva es una cuota de poder aguirrista). El debate se va a poner bueno y si no se logra un acuerdo antes de que inicie la sesión, será el voto mayoritario quien defina las cosas como sucede en las democracias, aunque no nos guste a todos dicha determinación.
NORMAL, EL GABINETE POLÍTICO
El Gobernador del Estado Ángel Aguirre Rivero, designó ayer al abogado Misael Medrano Baza como nuevo sub Secretario de Asuntos Políticos, con lo que se completa la nómina de la Secretaría General de Gobierno. Misael es un perredista químicamente puro, tiene amplio conocimiento de las organizaciones sociales que pululan en Guerrero y de los “lucradores” que las encabezan.
Esto puede permitirle a Misael hacer un buen trabajo y ayudarle bien, tanto al Gobernador como a su jefe inmediato Jesús Martínez Garnelo, para bajarle unos grados la temperatura al ambiente político de nuestra entidad, que suele subir a niveles preocupantes sin que se llegue desde luego, a situaciones como las de Michoacán.
Por otra parte, Misael sabrá ahora que no es lo mismo ser borracho que cantinero. Consciente de su responsabilidad, debe saber sopesar las cosas para no darle por su lado del todo a nadie, y para poner los asuntos en la balanza y darles su debido peso. Las cosas vuelven a la normalidad en la Secretaría General de Gobierno y Jesús Martínez Garnelo, luego de hacer un “corajito” que lo puso al borde de la histeria, ya se ocupa de los asuntos que debe resolver para beneficio de nuestra entidad.
Cabe hacer un reconocimiento al politólogo y periodista Moisés Alcaraz Jiménez, por el excelente desempeño que ha tenido como Director de Gobernación Estatal. Nuestro colega trabaja sin descanso y se mueve constantemente por toda la entidad, donde se generan los conflictos, para dar una inmediata y oportuna representación oficial ante los grupos demandantes.
De manera discreta, sin incurrir en abusos ni dislates propios de gente soberbia o prepotente, Moisés Alcaraz ha sabido arrancar el diálogo con las organizaciones movilizadas, y sabe tender puentes de comunicación para iniciar las negociaciones. En algunos casos, su integridad física se ha visto en riesgo por razones naturales; pero el Director de Gobernación no le saca al parche, porque sabe que el diálogo y su actitud de hombre sereno y conocedor, son la mejor arma para salir adelante en su delicada encomienda.