MEMORÁNDUM

Gerardo Ruano Cástulo

*** El todo, es más que la suma de sus partes

El tema central de los diferentes institutos políticos, en la ruta del 2015, es la unidad. No es para menos, la próxima cita electoral se vislumbra muy competida, y en la que tanto PRI como PRD, tendrían la oportunidad de ganar la gubernatura. Se habla de una distancia mínima entre ambos partidos en el ánimo de los potenciales electores. Además de algunos factores, como la incursión de MORENA, y la falta de un liderazgo que hoy aparezca en la cima, con la posibilidad de encabezar un proyecto mediático que desborde las pasiones.

Así es. Los hechos indican, que la palabra clave que habrá de definir las próximas elecciones en Guerrero, será la unidad. Pero aquella unidad, que rebase la simple lógica de que el todo es la suma de sus partes. Esto va más allá de los pronunciamientos y las fotos para los medios de comunicación. Se impone un tejido de amarres sólidos, en donde la apariencia y la simulación sean desterradas, para pasar al terreno de la suma de actores políticos y sociales que hagan posible la sinergia, a efecto de que esa energía impacte en el seno de la sociedad, y especialmente en quienes posean el instrumento de poder, llamado credencial para votar.

El todo, es más que la suma de sus partes. Esa es una regla para alcanzar el éxito. Es una regla de la misma naturaleza. Entender que la sinergia se registra, no solamente cuando se ponen sobre el papel las firmas, sino cuando todas las partes se ponen en acción y coordinación. Un ejemplo magnifico de esto, se desarrolla dentro del cuerpo humano. Es cierto, cada parte y órgano es importante de manera aislada. Podemos hablar maravillas de un riñón o el hígado, pero cuando hablamos en conjunto del sistema digestivo y excretor, los poderes de ambos órganos se magnifican. Su potencial y efecto se eleva. Los resultados son espectaculares. Ahí la prueba, de que el todo, es más que la suma de sus partes.

No es casual, que hoy desde los partidos de la izquierda se analice la posibilidad de ir coaligados. El PAN ha dejado entrever su deseo de ir aliado con ellos, con la finalidad de siempre: impedir que el PRI regrese a Casa Guerrero. Es evidente, a pesar de que Carlos Reyes Torres, dirigente perredista, asegure que tienen todo para ganar, en esa trinchera, saben de la importancia de las alianzas para el 2015. Dentro de sus mentes, debe estar claro que MORENA, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, aparece como un alto riesgo para su causa, y lo es más, porque podría ser la encarnación de un karma, que amenaza con cobrarle la factura, a todos aquellos que se colgaron de su imagen para llegar a un cargo público, desde el que no hicieron mucho, y que hoy le han dado la espalda.

En el caso del PRI, los recientes movimientos realizados por el presidente municipal capitalino, Mario Moreno Arcos, al asumir con todo el liderazgo de los alcaldes de su partido, para lo del mando policial único, la defensa del cobro del predial y demás proyectos, envían una señal clara de que buscan el cierre de filas total. No olvidar, que en esa cita, también estuvieron los diputados locales. Ese mensaje, en el terreno político, debe entender como una señal de lo que habrán de buscar para alcanzar los objetivos en 2015, en donde la meta máxima, debe ser su regreso a la gubernatura.

El punto es, que desde ambas trincheras saben de la importancia de la unidad. La diferencia se establecerá, sin lugar a dudas, a favor de quien tenga claro el concepto, de que el todo, es más que la suma de sus partes. No se trata solamente de engrasar una maquinaria, sino de hacer posible, que el espíritu de ésta, esté enfocado en dar los mayores y mejores resultados posibles. La foto de agosto de 2010, fue eso simplemente para el PRI. Y en el PRD, sería un error olvidar, que los errores del partido tricolor, los volvieron a poner en Casa Guerrero. Esa es la cuestión.