MEMORÁNDUM

Gerardo Ruano Cástulo

*** Ángel Aguirre; sus detractores y el aprecio de la gente

El periodo que le ha tocado al Gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero, ha sido de mucha turbulencia. Las situaciones críticas se han ido sucediendo una tras otra. No ha habido mucho espacio de respiro. Pareciera, que siempre ha existido un plan para desgastar y golpear la imagen del mandatario. De no dejarlo trabajar en paz. Y en medio de todo eso, a pesar de las adversidades, mantiene un buen grado de aceptación entre la ciudadanía, para envidia y coraje, seguramente, de sus detractores.

Así es. Revisando los antecedentes, le ha tocado gobernar en uno de los momentos más complicados de la entidad. Inseguridad, violencia, grupos de autodefensa, ayotzinapos, cetegistas, desastres naturales, han sido parte de los asuntos que han entrado en la agenda. Los desastres naturales escapan a la mano del ser humano, en tanto, de los demás asuntos, pareciera que ha existido algún movimiento extraño, con tal de no dejar trabajar a gusto al mandatario Aguirre Rivero. Y no es para menos, en la elección interna reciente del PRD, dejo en claro, muy en claro, que posee un equipo bien organizado y distribuido por la entidad, listo para operar y hacerse sentir en las elecciones de 2015.
Es curioso, pero cada vez que ocurre alguna situación que roba la atención de los medios, salen las voces a decir que los días del Gobernador están contados en la silla del poder. Una postura simplista, porque se olvidan, por citar tan solo un dato, que hoy existe en Guerrero un gobierno itinerante, que ha recorrido un gran kilometraje, estando cerca de todos los municipios, en donde se ha dejado sentir el apoyo solidario del mandatario estatal. A tal grado, que no es casual, que en los sondeos de opinión, aparezca con muy buenos índices de aceptación.
El primer gran paso, para pedir la dimisión  de un gobernante, debe corresponder al sentir de la gente. En éste caso, el Gobernador Ángel Aguirre cuenta con un alto aprecio. Lo que se puede constatar en Acapulco y Chilpancingo, los dos municipios más grandes e importantes de la entidad, en donde su gobierno ha hecho enormes inversiones. En la capital ha sido solidario con el asunto del agua. Y en Acapulco, el record de obras y acciones es realmente destacable.        
Lo ocurrido en Iguala no es una situación fácil. El gobernador ya está al frente de la situación, moviendo a la estructura gubernamental con el objetivo de dar respuesta eficaz. Buscando a los responsables de tan condenables hechos para presentarlos ante la justicia, así como en la búsqueda de los desaparecidos. En medio de eso, la pregunta sigue siendo la misma, ¿Quién eligió a Ayotzinapa para darle problemas al Gobernador Ángel Aguirre? Por citar un dato. 
El punto es, que si se observa con detenimiento, el saldo del gobierno Aguirrista en obras y acciones es bueno. La imagen del mandatario estatal ante la gente se mantiene en buen nivel. Luego entonces, si podría haber algunos interesados en bajarle algunos bonos. Más aún, cuando las elecciones concurrentes de 2015 están a la vuelta de la esquina.
La versión de que el presidente Peña Nieto ha dado un ultimátum al Gobernador para que resuelva el asunto de Iguala, con advertencia de pedir su dimisión, es un buen intento de sus detractores. Más lo que se ve en el fondo, es ese deseo incesante de desgastar la imagen del mandatario Aguirre Rivero. Bastaría recordar, que con ese tipo de ataques ha convivido durante el periodo gubernamental.
Nadie puede minimizar lo sucedido en Iguala. Pero del mismo modo, sería mezquino olvidar, que en medio de todas esas situaciones críticas, el gobernador siempre ha salido a dar la cara, y seguir recorriendo el estado, municipio por municipio, saludando de frente a la gente, porque simple y sencillamente, no tiene nada que esconder. Y su interés superior, es servir a su pueblo. Esa es la cuestión.

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