GOBERNADOR SIN DISCURSO

Por Federico Nogueda Berdeja

“La Madre Revolución de 1910, fue tan sanguinaria que hasta sus propios hijos se comió. (Octavio Paz)

Algo que ha caracterizado a los gobernantes que tienen determinado éxito en sus administraciones es porque cuentan con una definición de su discurso, este te da los lineamientos a seguir y  ejemplifica a los receptores hacia donde se quiere ir, otra cosa es Plan Estatal o Nacional de Trabajo, el gobernador sustituto de Guerrero, Salvador Rogelio Ortega, parece que no tiene discurso o almenos así no los ha dejado saber en sus intervenciones.

De esta forma contamos con un gobernador sencillo, paciente, con voluntad, calidad humana para tratar de resolver los problemas, pero su mensaje no le ayuda, ni tampoco la comunicación hacía los medios, parece que no hay empatía, y no necesariamente tiene que haber, ´pero si lo necesario para sobrevivir a las circunstancias, suele enojarse muy pronto, es impaciente, en consecuencia urge que contrate a alguien para que le ayude a diseñar un buen discurso reflejado a la crisis que vive el estado, así también en comunicación directa.
Otro aspecto es que también quiere quedar bien con todos, aunque ya dijo que no es así, incluso señaló a sus amigos izquierdosos que están molestos con él, pero no es creíble en los hechos cuando trata de ensalzar a todos un ejemplo muy claro y que molestó a varios sectores sociales cuando se refiere al gobernador con licencia, Ángel Aguirre, que casi le construyó un poema al describirlo en una entrevista, siendo que no son los momentos para decir eso por lo desgastado que salió Aguirre.
En ese mismo sentido,  cuando tocó el turno de hablar del presidente Enrique, también dice que es un personaje que sabe ser buen anfitrión, apoya, inteligente, con buenas intenciones para Guerrero, es decir casi lo máximo, que no está mal, pero también no son los momentos para intercambiar epístolas, ya que lo que más urgen son los resultados, así hace lo propio con los familiares de los 43 normalistas desaparecidos, en el programa de Adela Micha, donde dijo “que está dispuesto hasta dar la vida con tal de que regresen”, aunque en otras entrevistas diga que hay que estar preparados para todo.
Es evidente entonces,  que a don Salvador Rogelio Ortega necesita pero a la voz de “ya” un buen asesoramiento de nivel, sin improvisaciones, quiere gente experta, eficaz, en la construcción de su discurso para que vaya dirigido a algo y no al acontecer diario, es decir que no vaya al día, sino a la prevención de lo que pueda generar más problemas, acompañado de una comunicación valga el pleonasmo que comunique, ya que ahorita solo informa, no hay eco en la ciudadanía.
De no tomar las medidas, estaría destinado a que la madre crisis de los 43 desaparecidos se lo coma, como se comió a Aguirre. Ya el poeta Octavio Paz lo había dicho en la crisis de la Revolución de 1910, “La Madre Revolución de 1910 fue tan sanguinaria, que hasta a sus propios hijos se comió”, sino pregúntele a Madero, luego entonces entre que se lo coman o salve su circunstancia estará la moneda en el aíre.

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