Memorándum

*** Astudillo, con más méritos para gobernar

Gerardo Ruano Cástulo
Cierto día llegó el encargado del reparto de paquetería a un barrio de condición media. Tocó la puerta de uno de los modestos apartamentos. Salió de él, un hombre de aspecto fuerte, al ver al mensajero, le preguntó el motivo de su visita. Le explicó que llevaba un paquete a su nombre, con el porte por pagar, o sea que por recibirlo tenía que dar la cantidad de 50 pesos.

El hombre revisó y efectivamente, era para él el paquete. Enviado por un familiar desde el extranjero, como parte de la herencia de un tío fallecido. Al ver el precio de los 50 pesos, lo consideró una burla y dimitió quedarse con él. Dijo al mensajero que se lo llevara, que no estaba dispuesto a pagar el costo del envío.
Cumpliendo con el protocolo, el paquete regresó a la oficina de la empresa, en donde permaneció, los años que estipula la ley, a efecto de poder ser subastado. Pasado el tiempo, fue comprado por una persona que pagó la cantidad de mil pesos.
Grande fue la sorpresa, para aquél personaje que compraba en las subastas, que en aquella caja, se encontrara con un lote de joyas muy valiosas y valuadas en más de 5 millones de pesos. 
Después se supo, que el hombre que no quiso pagar 50 pesos por el paquete, muriera en la soledad de su cuarto, luego de pasar momentos complicados por lo bajo de su pensión económica. Al morir, en sus bolsillos, le encontraron más de cien pesos. Más del doble de lo que le pedían por el paquete. Pero no quiso pagar el precio.
El asunto es, precisamente, que Dios y la vida en ciertos momentos llevan a manos del ser humano los paquetes, llamados oportunidades. La situación no es aceptarla. Sino desear y realmente pagar el precio. Nada es gratis en éste mundo. Bien se dice en la biblia: Quien no trabaja, que no coma.
Bajo esa consideración, y ponderando la lona recorrida por los candidatos a gobernador, es evidente que el del PRI y Verde Ecologista, Héctor Astudillo Flores, es quien más sabe de pagar un precio por cada oportunidad. No hablamos de lo ocurrido en 2005. Sino de que siendo un profesional de la política, ha sacrificado muchas cosas para permanecer vigente entre el electorado.
No es casual que a Héctor Astudillo lo conozcan en todos los municipios de la entidad. Hay que decirlo, es de los candidatos a Gobernador, el que más tiempo, por ende vida, le ha invertido en el terreno político, con la finalidad de servir bien a los demás.
Hoy, su vocación de servir está enfocada en una ruta muy clara: Regresar la paz y el orden a Guerrero. Su visión es producto de todo el aprendizaje que ha adquirido. De toda la inversión que ha hecho, la cual, lo ubica muy bien posicionado y con grandes, más bien enormes, posibilidades de ganar la gubernatura el primer domingo del mes de junio.
PARA ESCRIBIR A CASA: Tan popular es el Gobernador, que 4 de cada 10 empleados de gobierno, trabajadores municipales, maestros del estado y empleados de OPD, no se saben su nombre. ¿Cómo ve, amig@ lector?-
 Esa es la cuestión.

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