Memorándum

*** Lo aportado por Adolfo al SUSPEG.

Por Gerardo Ruano Cástulo
Cuentan, fuera de los evangelios, que un día Jesús se dirigía a Nazareth. Iba acompañado de varios de sus discípulos. En eso, el maestro se salió del camino trazado y comenzó a transitar por un lugar distinto. Ante ello, sus cansados seguidores, le dijeron: “Por ahí no es maestro. El camino que conocemos, es la brecha que está marcada, así es seguro llegar al pueblo”. 

Al escuchar esto, Jesús volteó a mirar a sus discípulos. La mayoría esperaba que les diera la razón. Que les dijera que se había equivocado. Más no. Su respuesta fue la siguiente: “Quién les dijo, que vine a seguir los caminos trazados. Vine para abrir nuevos caminos. Quien guste correr los riesgos e ir por nuevos caminos, que nosotros trazaremos, síganme, los demás pueden seguir por donde siempre”. 
El resto ya lo conocemos, sencillamente cambió y marcó la historia. (Del Taller de la Imaginación de Juan Francisco R.)
Traigo hoy está historia, ante la importancia que reviste hacer cosas diferentes. El salirse de lo cotidiano o rutinario. El dejar la llamada zona de confort. Y los resultados, cuando se decide abrir nuevos caminos, son palpables. Ahí está el ejemplo del SUSPEG, cuya organización sindical ha cambiado de manera importante con el curso de la historia.
Hace algunos años, se cuestionaba la relación de sumisión que había hacia el gobernante en turno. Es más, desde Casa Guerrero se indicaba quien iba como líder estatal, pasando por encima de la voluntad de los trabajadores.
La nueva era del SUSPEG viene con la puesta en marcha de una reforma, que da pauta a las elecciones democráticas. Ahora sí, se contarían los votos de los trabajadores. La parte patronal tendría que hacer más esfuerzos para imponer a alguien o recurrir a más marrullerías.
Los tres últimos líderes de la organización emanan de ese nuevo formato. En dos de ellos, tuvieron que remar contra la corriente. El entonces Gobernador Zeferino Torreblanca intentó imponerse por sobre los trabajadores, quienes le dijeron que no en las urnas. Hablamos pues, del grupo que ha abierto un gran camino en esa organización sindical. Decidieron dejar el camino de siempre. Hacer algo diferente y marcar diferencia.
Esa nueva forma, implica más contacto entre quienes aspiran y sus compañeros, así como un trabajo más responsable, porque los resultados se califican en la urna. En medio de esa nueva era, surge el liderazgo de Adolfo Calderón Nava, quien se ha colado a la historia, luego de alcanzar los más grandes consensos y llegar a la dirigencia por medio de una planilla única.
¿Qué ha ganado el SUSPEG con Adolfo Calderón y el camino que ha abierto? Ha fortalecido la comunicación interna del sindicato, se ha consolidado la organización como una institución de trabajo y se ha fortalecido el respeto ganado ante la parte patronal.
Por esa razón, fracasaron los intentos, de cierto funcionario, por tratar de condicionar los acuerdos, a cambio del apoyo a la candidata del PRD a la gubernatura. No hubo de limón. El SUSPEG es autónomo y se mueve en libertad política. El líder estatal se debe a su base, y desde ahí, se gestó el apoyo a Héctor Astudillo Flores. 
En eso radica la importancia del camino que han abierto en esa organización sindical, y el propio, abierto por Adolfo Calderón Nava. Esa es la cuestión.

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