ZONA CERO

Asesinato en Cuaji: ¿acción política?

Roberto Santos

Luis Justo Bautista, diputado local por el PRI, ha negado ser el autor intelectual del asesinato de 13 personas en un palenque clandestino en la cabecera de Cuajinicuilapa.  Lo que al parecer pretendía ser la ejecución del líder de una empresa criminal local, y terminó en un asesinato colectivo, tiene más visos de una acción delincuencial con fines políticos de dañar la imagen del diputado local, Luis Justo Bautista.

El video difundido donde se acusa al diputado de ser autor intelectual de esa aberrante acción, tiene tantas inconsistencias como afirmaciones ilógicas, amén de que el video grabado por unos embozados tiene rasgos de ser un libelo en contra del diputado en mención. 

Se trasluce la intención de afectarlo políticamente, conscientes de que si bien ese video no prueba nada y es insustancial ante las autoridades judiciales, políticamente sí le puede afectar, porque habrá quienes sí lo crean verídico.

La hipótesis que puede ser más verosímil, es que esta acción puede venir de alguien descontento por los resultados de la elección del 7 de julio, y que busca como ensuciar la imagen de quien pudo obtener resultados positivos electoralmente.

Fue el 8 de noviembre cuando un grupo de hombres armados atacó a los asistentes a un palenque clandestino en la cabecera municipal de Cuajinicuilapa, con el saldo de más de una decena de muertos, y que el asalto iba dirigido en contra de un supuesto líder de un grupo criminal contrario, pero al no encontrarlo mataron gente inocente, señalan los supuestos asesinos.

Es inverosímil que los supuestos asesinos mencionen en ese video de que se arrepienten, porque lo subieron con la supuesta intención de cobrar el resto del pago. Además, no hay sicario que se arrepienta de asesinar a sus víctimas. El gusto que poseen de agredir y matar tiene que ver con la estructura de su personalidad y no entra en su patrón de conducta arrepentirse de sus asesinatos. Contrario a ello, y lo hemos visto muchas veces, les gusta celebrar con entusiasmo cada muerte que logran, y no salir a lloriquear que les falta parte del pago y que se lamentan de haber matado. 

El diputado ha señalado desconocer el origen de esta acusación y dice ignorar si se trata de una “maniobra política”, porque no tiene enemigos políticos.

Afirmó tener la consciencia tranquila y de que nada tiene que ver, además de exigir que este acto se esclarezca y para ello se pone a disposición de las autoridades encargadas para ser investigado o ser llamado a declarar. 

Ojalá las autoridades encargadas de procurar justicia realicen las investigaciones para dar con el paradero de quienes cometieron este cruel asalto donde mataron a gente inocente y que aclaren el origen y pretensión del video difundido en contra de Luis Castro Justo. 

Otra acusación inverosímil es la acusación infundada que lanza la perdedora de la pasada elección a gobernador, Beatriz Mojica, quien para restañar sus heridas, insiste en señalar sin prueba alguna de que existe un pacto criminal y que eso es lo que ha generado la violencia en el estado de Guerrero. Penoso sin duda que se atreva a afirmar algo que no puede probar, y que sirva para justificar su existencia como política, cuando bien puede utilizar su escasa experiencia en cuestiones más importantes de su partido.  Insistir en lanzar acusaciones sin sustento ni prueba alguna, le dañará más a ella, pues poco a poco, esos señalamientos le restarán esa poca credibilidad que tenía, y que fiel reflejo fue que perdiera la elección de manera desastrosa para su candidatura y su partido.