Acapulco, Gro., enero 20 de 016 (IRZA).- Una intensa movilización de policías y militares se desarrolló la tarde de este miércoles en la parte alta del fraccionamiento Condesa, donde se reportó el hallazgo de una fosa clandestina con restos humanos que, finalmente, resultaron ser huesos de perro.
El acontecimiento se dio alrededor de las 17:20 horas en las inmediaciones del famoso restaurante El Campanario, en un terreno boscoso, hasta donde elementos policiacos de los distintos órdenes de gobierno y efectivos militares arribaron para acordonar la zona, mientras perros amaestrados olfateaban cada metro de tierra en busca de cadáveres.
Al lugar también arribó el agente del Ministerio Público del Fuero Común de Costa Azul y personal del Servicio Médico Forense, quienes excavaron en un punto de tierra suelta para llevarse la sorpresa de que lo ahí enterrado era un perro.
Tras mofarse entre ellos del fiasco que se llevaron, policías, militares y funcionarios ministeriales volvieron a sus respectivas bases.
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