Se fomenta la afición a la lectura en el “paralibros” ubicado en la plaza del artista


Desde hace aproximadamente dos años el Paralibros fue cambiando de la plaza municipal a la Plaza del Artista, considerado un espacio para la cultura con la idea de que se aprovechara más, pues donde estaba prácticamente no era visitado.

Al respecto el encargado del Paralibros, José Antonio Urbina Bello, expreso que la gente utiliza más ese espacio para descansar, pues lo ve como una casetita para sentarse a descansar y protegerse un poco del sol.
Agregó que lo anterior es debido a la falta de difusión sobre la existencia de ese espacio de fomento a la lectura, pues al parecer la población no sabe que en esta ciudad y puerto se cuenta con un lugar donde se puede acudir a leer un libro.
Añadió que diariamente visitan el espacios más de 10 personas para cubrirse un rato del sol, pero cuando mucho acuden cuatro con la intención de leer un libro, y a la semana se prestan para leer cuando muchos unos 10 ejemplares, que leen más los turistas que los propios lugareños.
Indicó que “El Paralibros cuenta con un acervo de 360 libros, pero al mes se han de prestar unos 150 ejemplares, pero leen más los visitantes unos cuatro por día, en tanto la gente local pide prestados unos 8 o 10 a la semana”, comentó Urbina Bello.
Debido a lo anterior, dijo que desde hace más de medio año, por iniciativa propia, se ha dado a la tarea de hacer promoción en las escuelas de todos los niveles, para hacer la invitación que acuda al programa  “Cuentacuento”, que se lleva a cabo los jueves y los viernes desde las 8 de la mañana.
Indicó que a la fecha han acudido más de 300 alumnos de diversos planteles; de preescolar, primaria, secundaria y nivel superior, pues han acudido  de los jardines de niños Luis Enrique Pestalozzi y Primavera, también de la primaria José María Morelos y de la secundaria “Eva Sámano de López Mateos”, así como de la facultad de Turismo de la Uagro.
Asimismo, el encargado del lugar dijo que también ha llevado el programa, que es para niños, jóvenes y adultos, al Centro de Reintegración Social (Receso); “hacía falta promover el Paralibros, por lo que personalmente nos dimos a la tarea de invitar a las escuelas para que vengan a leer un libro y aprovechen este espacio de lectura gratuitamente”.
Recalcó  que se cuenta con libros de tres tipos; infantil, adolescentes y adultos, y que además se llevan a cabo círculos de lectura como lo marca el programa.
Por lo que poco a poco el Paralibros que se ubica en la Plaza del Artista pronto dejará de ser un espacio que la gente ocupa esa estructura para descansar un poco, protegerse del sol un rato, incluso lo han utilizado hasta para el romance, sin interesarles leer un buen libro, pero que poco a poco se está fomentando la afición a la lectura.

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