MEMORÁNDUM

*** La buena o mala actitud, se contagia

Gerardo Ruano Cástulo
La señora se levantaba molesta por las mañanas. Otro día más de quehacer. Iniciaba con la banqueta de la casa. Barría, y en lugar de juntar la basura, la aventaba, discretamente, a la banqueta del vecino. Lo mismo hacía desde el patio. Veía que nadie la estuviese observando, para echar la basura al patio del vecino. Todos los días era la misma rutina.

Sin embargo, el vecino con su hijo si la observaban discretamente. Ante eso, el pequeño le dijo un día a su papá: “Deberías reclamarle a la vecina, para que limpie también nuestro patio”.
El señor le indicó: “mira hijo. Todos tenemos problemas con la basura. Nadie quiere tener esa suciedad y contaminación. Pero viendo el mal humor de la vecina. Le acepto que nos eche la basura en el patio, pero no que nos caiga su mal humor a nosotros”. (Del taller de la imaginación de Juan Francisco R.).
Existe una regla básica para mejorar la actitud: “Alejarse de la gente tóxica”. Efectivamente, la negatividad, como el mal humor, se contagia. Son virus muy potentes. Más poderosos que muchas enfermedades. De ahí, que rodearse de gente tóxica, merma la buena actitud. Y va produciendo daños internos en las personas.
ENTRANDO EN MATERIA, y hablando de buena actitud, ahí está el trabajo que desarrolla, el líder estatal del SUSPEG, Adolfo Calderón Nava, quien además de estar al pendiente de sus gestiones y de las necesidades de sus representados; se suma de manera muy solidaria en la búsqueda del rescate del ISSSPEG.
Sí. En su momento, Adolfo Calderón planteó al Gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, su preocupación por la situación que guarda el Instituto, lo que afecta directamente a jubilados y pensionados; pero además, el futuro de los empleados en activo.
Ante esto, el mandatario estatal hizo una aportación directa al ISSSPEG, de varios millones de pesos, 165 de hecho, a efecto de que no tuviese problemas con los pagos de fin de año, en 2015, y para mantener a flote el barco, hizo otra aportación de 60 millones de pesos, en el mes de febrero de éste año.
Aunado a esto, el líder estatal del SUSPEG, se ha unido, en un esfuerzo solidario, con el director del ISSSPEG, Jesús Manuel Uriostegui Alarcón, para negociar con los municipios el pago de sus adeudos. Habría que recordar, que gran parte de los problemas, se han generado por la morosidad de los municipios para trasladar las retenciones. De hecho, se entiende, que dichos recursos los han utilizado para otras cosas.
Por esa razón, se les vio en Acapulco, municipio que adeuda, institucionalmente, más de 100 millones de pesos al ISSSPEG. Porque al final de cuentas, aunque no es la responsabilidad directa de Adolfo Calderón, porque los pensionados y jubilados tienen asociaciones que cobran cuotas a sus agremiados, le mueve el futuro también de todos los trabajadores que van en ese camino.
Desde esa perspectiva, rescatar y fortalecer el ISSSPEG es un asunto de carácter social urgente. Y lo es, porque en ello va, el futuro de más de 20 mil trabajadores. Por eso, Adolfo Calderón se sube al barco y es solidario con ésta causa.
En lugar de estar del lado crítico. Del lado de quienes solamente exigen sin dar nada a cambio. Se pone del lado de la solución. De aportar, para evitar un colapso, que a nadie conviene. Esa es la cuestión.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario