OPINION

Más apoyo a las mujeres.

Por Manuel Tello Zapata.
Con la presencia ni más ni menos que del Secretario de Gobernación, Miguel ángel Osorio Chong, el Gobernador del Estado Héctor Astudillo Flores, acompañado por la Señora Mercedes Calvo de Astudillo, la Diputada local Flor Añorve Ocampo; los Alcaldes de Chilpancingo e Iguala, Marco Antonio Leyva Mena y Esteban Albarrán Mendoza, pusieron en operación ayer en Chilpancingo, el Centro de Justicia para las Mujeres del Estado de Guerrero, ubicado en la colonia La Cinca.

Al hacer uso de la palabra, Osorio Chong hizo un reconocimiento al Gobernador del Estado, por apoyar el esfuerzo real y compromiso decidido del gobierno federal, para proteger a las mujeres. Aseguró que Astudillo Flores es un Gobernador que ve de frente a la gente a quien sirve, a quienes les está cumpliendo sus aspiraciones de justicia y legalidad.
El mandatario estatal por su parte, aseguró que en los 11 meses de su gobierno ha tratado de hacer lo que le corresponde para estar cerca y apoyar a las mujeres en situación de riesgo, como la aplicación de la alerta Ámbar, el Protocolo ALBA, y las mesas de trabajo para darle el mejor camino a la Alerta de Género.
Las dirigentes de movimientos feministas que estuvieron presentes, agradecieron a nombre de las beneficiarias, la construcción de este centro, que será determinante para romper con la violencia que vivían o viven en sus hogares. Tanto los funcionarios presentes como las feministas, invitaron a todas las mujeres que sufren de violencia, para que acudan a este centro y denuncien a quienes las agreden y violentan sus derechos más elementales.
FORTALECIENDO AL PARTIDO.
El Partido Revolucionario Institucional de Guerrero camina con buen paso en su fortalecimiento y reestructuración bajo la dirigencia de José Parcero López, quien en fecha próxima y con la presencia de su dirigente nacional, tomarán la protesta a los miembros del nuevo Consejo Político Estatal, cuya elección concluyó sin ningún problema y que como máxima autoridad local de ese partido, habrá de definir en su momento, la elección del nuevo Presidente del Comité Directivo Estatal.
Siendo un político de amplia experiencia y un politólogo académico, José Parcero ha sabido apoyar al Gobernador y primer priísta Héctor Astudillo Flores, debatiendo públicamente con los líderes de otros partidos y políticos que con dolo, o buscando llevar agua a su molino, emiten críticas y ataques contra la administración estatal.
Don José Parcero no pretende eternizarse en el cargo y una vez que se encuentre operando el Consejo Político Estatal, Presentará su renuncia para dar paso a la elección estatutaria, de quien llevará el mando del partido tricolor por los próximos cuatro años. 
En este sentido, ya se manejan diversos nombres para ocupar los zapatos de Parcero, que le quedarán muy grandes a cualesquiera que no reúna el perfil para ocupar dicho puesto. Especialmente en estos momentos de crisis política por la que atraviesa el priísmo a nivel nacional, una entidad como Guerrero, donde su fuerza es evidente, debe mantener un buen paso y aumentar su prestigio entre los electores.
Si el priísmo guerrerense se equivoca y se recurre nuevamente al dedazo, la imposición o el capricho de algún político venido a más… o a menos, las consecuencias podrían ser catastróficas para los intereses de agrupamiento.
El próximo dirigente del PRI debe reunir diversos pero necesarios requisitos para que  logre hacer un buen trabajo. En primer lugar: practicar la lealtad con el Gobernador del Estado… y no de ahora, sino de tiempo atrás. Tiene que contar con por lo menos 25 años de experiencia partidista. No debe militar en ninguna de las corrientes políticas conocidas, como el figueroismo, el añorvismo, el renejuarismo, etc., para que pueda mantener un activismo interno totalmente plural, sin favorecer a un grupo en especial. Debe tener buen prestigio dentro y fuera del partido y no ser señalado de corrupto.
En estos momentos de gran competencia electoral, quien aspire a ser el Presidente del CDE del PRI tiene que contar con amplia experiencia en este sentido. Debe haber competido en por lo menos cuatro procesos electorales como candidato a Alcalde, Diputado local, Diputado federal, Senador, etc., y no haber perdido ninguna de sus batallas. Un dirigente estatal que solo ha ocupado cargos por la vía plurinominal, muy poco o nada puede hacer para dirigir un barco como el PRI, en medio de los difíciles procesos electorales que ya se acercan.
NOMBRES, NOMBRES.
Si nos atenemos a estos requisitos para ser un buen dirigente del priísmo guerrerense, existen muy pocos pretensos que se ajusten a la norma de calidad necesaria. Uno de estos es sin duda el Contador Mario Moreno Arcos, hombre que no milita en ninguna corriente y cuenta con su propia estructura; que es leal al cien por ciento con el primer priísta del Estado, Héctor Astudillo Flores, a quien le dio todo su apoyo para que fuera primero el candidato a Gobernador, y luego para que ganara la elección constitucional.
Mario Moreno tiene experiencia partidista y comenzó desde abajo su trayectoria pasando por todos los cargos, desde pegar posters en las calles hasta ser candidato. Electoralmente ha ganado dos veces una diputación federal, dos veces la Alcaldía de Chilpancingo, una vez fue diputado local y participó en las elecciones nacionales del 2014 como delegado en Tlaxcala, y también se ganó esa elección. No  ha perdido ni siquiera un municipio de los distritos donde ha sido candidato.
Se trata de un hombre sencillo, de buen trato y humilde por naturaleza. Es bien conocido por los guerrerenses y sabe tratar con todos los líderes importantes de las corrientes en un medio de respeto y amplia consideración a las propuestas. Obviamente, hay varios nombres y otros priístas que pueden ser buenos dirigentes estatales, aunque difícilmente logran reunir el perfil más adecuado para los tiempos actuales.

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