MEMORÁNDUM

*** ¿Qué nos toca hacer?

Gerardo Ruano Cástulo
El maestro fue directo con sus alumnos: “Antes de iniciar el curso, quiero preguntarles, ¿Quién de ustedes, desea obtener diez sin hacer trabajos, exámenes, tener participaciones y sin venir a tomar la clase.”.

Nadie levantó la mano. Todos en silencio. El maestro insistió: “La propuesta es cierta. Si alguien de usted desea obtener el diez de esa manera, puede levantar la mano y con gusto lo registro en la lista”.
Ahora, la mayoría levantó la mano. “Muy bien”, dijo el maestro, para después proponerles: “hagan una lista y me la entregan.”. Se juntaron rápidamente e hicieron la relación. Pocos se negaron a entrar a esa lista.
Una vez concluida la relación, fue puesta en manos del maestro, quien les puso diez y les pidió salir de clase. A los que se quedaron, les preguntó: “¿Alguien más desea sumarse a la lista? Aún hay tiempo”.
En respuesta, unos más se sumaron. A los restantes les preguntó: “¿Ustedes porque decidieron quedarse?”. Uno de los alumnos expresó: “Nada es gratis en la vida. Lo fácil trae infortunio y desgracias.
El maestro agregó: “La pereza aniquila al ser humano y las relaciones entre ellos.”. (Del taller de la imaginación de Juan Francisco R.)
Para los llamados críticos del momento, solamente existe el tema de la violencia e inseguridad. No hay espacio para hablar de la derrama importante de recursos que llegó al Estado, en el puente de la Revolución.
No hay lugar, para mencionar los apoyos que fluyen para los productores del campo. O de eventos altruistas, donde se suman artistas en obras a favor de la salud de la mujer.
Tampoco, para la visita del Gobernador Héctor Astudillo Flores a la cabecera del Municipio de Eduardo Neri, en donde inauguró distintas obras y se reafirmó la magnífica relación que existe con los alcaldes emanados del PRD.
Para ellos, nada de eso pasa en Guerrero. Ni siquiera la importante recuperación de la vida institucional y que se nota la presencia de un líder en la Gubernatura.
Su tarea, parece ser, la de llevar el recuento de una Guerra que tiene años de haber comenzado, y de la que todos debemos sentirnos responsables. Lo ocurrido en septiembre de 2014, con la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, fue una señal clara, de la gravedad del cáncer que padece la entidad.
En realidad, por la gravedad del asunto, nadie en su sano juicio, puede asegurar cuando va a parar ésta lucha que libran los grupos delictivos. Lo que si sabemos, es que todos tenemos algo que hacer. Evadir la responsabilidad es fácil. Criticar no cuesta nada, y por ende, no aporta nada.
Los últimos acontecimientos nos recuerdan que el ambiente, está para que todos hagamos la parte que nos toca. Y no simplemente, estar replicando los reprobables actos de barbarie.
Creo que el Gobernador Héctor Astudillo lo ha planteado bien ante la Federación. Y no es casual, que hoy, los municipios con mayor incidencia estén en una lista de atención preferencial. El mandatario estatal no esconde nada. Está ocupado en buscar reducir los índices de violencia e inseguridad.
La pregunta es: ¿También a nosotros nos ocupa buscar que podemos aportar? 
POR CIERTO, no es casual, que el Secretario Particular del Gobernador, César Armenta Adame, haya sido el orador oficial, durante el desfile alusivo al día de la Revolución Mexicana, en Chilpancingo. No lo es, porque viene creciendo en aceptación. Esa es la cuestión.

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