MEMORÁNDUM

*** Ganar, ganar; clave de éxito.

Gerardo Ruano Cástulo
Está en su punto más bueno la competencia del deletreo en inglés, spelling. Son las semifinales. Como es de esperarse, las dos alumnas más destacadas logran imponerse y llegan a la gran final.

La final se realiza en el auditorio de la escuela. Padres de familia y alumnos son testigos de la transparencia del evento. Los jueces, maestros de inglés, siguen puntualmente cada letra en inglés pronunciada por las alumnas, y que éstas completen correctamente las palabras.
Es una final memorable. Ambas alumnas deletrean magníficamente cada palabra. Han sorteado las más complicadas. Se encuentran en muerte súbita. Hasta que alguien se equivoque y la otra acierte, se acaba la competencia.
Después de algunos minutos. Sucede lo impensable. La alumna más destacada. La favorita. Falla en el deletreo. Pierde el concurso. Pocos lo pueden creer. Incluidos sus padres.
Al finalizar el evento, el padre ve tranquila a su hija, pero le pregunta: “¿Qué pasó hija, si la palabra estaba fácil para ti?”. Entonces la niña le responde: “Claro que me la sé papá. Pero mi compañera no había ganado y sus padres la regañan feo cuando pierde.”. (De una historia de la vida real)
El egoísmo y la ambición son fuertemente cultivados. Todo inicia en competencias. En querer ser mejor que los demás. Hasta llegar, a buscar pasar por encima de quien sea, con tal de lograr el éxito. Grave error, porque el mejor estado para alcanzar el éxito, es ser feliz; lo que se logra con satisfacciones más grandes, que rebasan el simple terreno material.
La historia de hoy es real. Es grandioso conocer de padres que enseñan a sus hijos a practicar la generosidad. A entender que el camino al éxito no deriva de competir y superar a los demás.
La regla, dice Covey en su libro los 7 hábitos de la gente altamente efectiva, se llama: “ganar, ganar”. Que ganemos todos. Si haces ganar a otros, en automático tú ganas. Pero el egoísmo y la ambición no permiten ver eso.    
Entrando en materia; ya desde diciembre lo anticipaba el Director del Instituto Estatal para la Educación de los Jóvenes y Adultos de Guerrero, IEEJAG, Jorge Salgado Parra, que la cuestión económica se venía complicada. Que se tenían que hacer ajustes, a efecto de mantener el buen nivel de trabajo que registra la institución.
Creo, desde esa perspectiva, que Jorge Salgado es un funcionario, que está sumamente comprometido con su trabajo. Con entregar buenas cuentas al Gobernador Héctor Astudillo Flores, aún en medio de las complicaciones económicas que se presentan.
Lo hemos dicho, en el corto tiempo, Jorge Salgado ha logrado dar un giro enormemente positivo al IEEJAG. Se ha pasado de un elefante blanco a una Institución que trabaja y viene entregando resultados.
Los números avalan su gestión. Hoy casi se ha hecho, lo que en otros sexenios completos. Es decir, los números hablan del aporte que se viene haciendo para combatir el analfabetismo. Ahí se ve la mano de Jorge Salgado, quien tiene un buen liderazgo en la Institución. Y todo en función del ejemplo de trabajo, que proyecta. Esa es la cuestión.

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