MEMORÁNDUM

*** ¿Sí o no a la crítica?

Gerardo Ruano Cástulo

Siendo la crítica el deporte más practicado y el virus más nocivo para la salud de quien lo realiza, recuerdo aquella historia del taller de la imaginación: “A un joven se le concede ver a Dios. Ya frente al señor, le reclama porque a los seres humanos no nos dio alas.

El joven le argumenta que con alas, seríamos, en verdad, los amos y señores del universo. Entonces, después de escuchar pacientemente, Dios le afirmó: “Ustedes no tienen alas, porque llevan dentro algo más importante; eso que llevan ahí, dentro, es la genialidad.”.

Luego le preguntó al joven: “¿Me cambiarías la genialidad por unas alas?”. Un profundo silencio invadió el lugar. Signo claro, de que lo más grandioso, ya vive dentro de cada ser humano.”.

Efectivamente, la crítica es parte “normal” de la vida. Es así, por la enorme cantidad de enfermedades mentales que han invadido a la humanidad. Por lo mismo; se deben saber administrar y procesar. No olvidar, que la presión es parte, también, natural de la vida. Las guitarras para que suenen bien, necesitan que sus cuerdas tengan la tensión necesaria.

De hecho, una de las causas principales del fracaso, es la pésima convivencia con las presiones. Los líderes extraordinarios saben sacar lo mejor de las situaciones adversas. De los momentos complicados. De la crítica, sea, dizque constructiva o no. En lo personal, considero a la crítica como un veneno de alto riesgo. Lo contrario a ello, es la edificación. Es simple, construyes o destruyes, no hay más.

Desde esa perspectiva, agrada la actitud que asume el Gobernador Héctor Astudillo Flores ante la crítica. Sus mejores respuestas son con trabajo. Lo hemos visto desde que asumió la gubernatura. Antes que hablar y hablar, se dedicó a recuperar la gobernabilidad y vida institucional del Estado.    

En medio de la situación crítica económica que le heredaron, se ha ocupado de que las acciones y programas de su gobierno no se vean frenadas. Y mucho menos, que se afecte a los trabajadores en sus percepciones y derechos. Prueba de esto, es que no ha tenido problemas en fin de año.

En lo más cercano, hemos visto, que cuando se venía lo más duro por el llamado gasolinazo, emprendió movimientos concretos, todos de trabajo, para dar la cara a la situación y como buen líder marcar la pauta y ruta ante la contingencia. Las marchas se han visto más con tintes políticos, que con el deseo de aportar. En cambio el Gobernador Héctor Astudillo tiene en marcha el plan para la estabilidad del estado y la estrategia para atender los asuntos de los migrantes.

Ahora, con lo de las quimioterapias, su mejor respuesta no podía ser otra, que la de inaugurar una nueva sala, con inversión propia de la entidad, a efecto de atender a miles de Guerrerenses; que más allá de polémicas y acusaciones, están en busca de tratamientos que mejoren sus condiciones de salud.

En el mismo tenor, trabaja su esposa, Presidenta del DIF Estatal, Mercedes Calvo de Astudillo, quien recientemente, acaba de firmar un convenio en el ámbito nacional, para que lleguen torneos de futbol, que abran un nuevo panorama a jóvenes y adolescentes.

A la señora Merce, como se le conoce cariñosamente, siempre se le trabajando. Ocupada en que programas y acciones lleguen a la gente que vive en estado más vulnerable.

POR CIERTO, en la capital un buen activo político, lo es sin duda, el regidor de obras, Julio Morales Díaz. Trabaja con sencillez. Cerca de la gente y sumado al desarrollo de colonias y comunidades. Esa es la cuestión.