CONTEXTO POLÍTICO

¿Alternancia en Chilpancingo?

Por Efraín Flores Iglesias

El Partido de la Revolución Democrática (PRD) se ve decidido ganar por primera vez la presidencia municipal de Chilpancingo. El escenario político-social le favorece a dicho partido y a su precandidato de unidad, Antonio Gaspar Beltrán. Veamos por qué.

El PRI perdió con Marco Antonio Leyva (MAL) en la Presidencia Municipal, ya que durante los dos años que éste administró el poder, solamente se dedicó a beneficiar a familiares y amigos en importantes cargos.
Lo peor de todo es que ejerció un gobierno intolerante, opaco en el manejo de los recursos públicos y malísimo para estrechar relaciones institucionales con alcaldes de otros municipios. Su confrontación con el alcalde perredista de Tixtla, Hossein Nabor Guillén, impidió que se concretara la operación del relleno sanitario en la localidad de Matlalapa. Y ese es uno de tantos ejemplos.
Mientras las protestas sociales arreciaban en contra de MAL, el PRI guardó total silencio. Lo solapó, pues. Bueno, eso fue antes que la gota derramara el vaso.
Al percatarse que su permanencia era más perjudicial para el priismo, se “sensibilizó” y solicitó licencia al cargo por tiempo indefinido.
Se fue el 16 de octubre del año pasado y las cosas no cambiaron como lo idearon desde la cúpula del PRI y en el Congreso del Estado, ya que a Jesús Tejeda Vargas, el suplente, le quedó grande la Alcaldía de Chilpancingo. A tal grado que en las redes sociales algunos usuarios han insinuado que el secretario general del Ayuntamiento, Joel Eugenio Flores, es quien realmente ejerce el poder en la capital del estado.
Por si fuera poco, a MAL se le ocurrió regresar al poder el pasado 8 de enero. Y para eso, hizo un show mediático. A medio mundo dejó sorprendidos. Nadie lo podía creer. Tal vez ni Walter Mercado. ¡Zas!
La ciudadanía, por supuesto, está harta de que MAL regrese a la Presidencia Municipal. Pero más molesta está contra quienes postularon al político de marras como su candidato en 2015. O sea, al PRI.
El tricolor no sabe dónde esconder la cabeza. Están conscientes –sus dirigentes– que haber llevado a MAL al poder, fue un gravísimo error.
Hay quienes se ufanan en señalar que “Chilpancingo es priista” y que “la oposición jamás ganará la Presidencia Municipal”. Es necesario reconocer y respetar el optimismo de los que así piensan, pues vivimos en un país en donde todos podemos expresarnos libremente.
Recordemos que antes de 1989 había quienes no creían en que caería el Muro de Berlín, o que el PRI saldría de Los Pinos en el año 2000.
Vivimos otros tiempos, en el que prevalece una fuerte competencia por el poder público y lucha de libertades.
En Acapulco, por ejemplo, el PRI dejó el poder en 1999 al ser derrotado por el PRD en las urnas. Y en 2008 regresó nuevamente el tricolor al derrotar al Sol Azteca. O sea, nadie ejerce el poder eternamente.
Y podemos citar también el caso de la Gubernatura de Guerrero.
El 6 de febrero de 2005 el PRI perdió por vez primera ante el PRD y su candidato Zeferino Torreblanca Galindo. Seis años después, el Sol Azteca volvió a ganarle al PRI con Ángel Aguirre Rivero. Y en 2015, el PRI volvió a Casa Guerrero con Héctor Astudillo Flores.
Y en este momento el PRI es a quien le toca enfrentar un escenario adverso en Chilpancingo por la irresponsabilidad de sus dos últimos alcaldes.
Tampoco se trata de decir que el PRD es el mejor partido en México y en Guerrero. No, no, nada de eso.
Todos los institutos políticos tienen en su interior a malos elementos que abusan del poder público, así como militantes con una carrera política intachable.
Qué bueno que el PRD logró un fuerte acuerdo de unidad en Chilpancingo y haya decidido que Antonio Gaspar Beltrán sea quien los abandere en la elección del 1 de julio, ya que es el aspirante más posicionado en las encuestas y el que cuenta con un importante trabajo político y territorial.
ENTRE OTRAS COSAS… Los que también se registraron como precandidatos a diputados, pero del PRI, son César Armenta Adame (distrito 1), Alicia Zamora Villalva (distrito25), Olaguer Hernández Flores (distrito 19) y Erik Catalán Rendón (distrito 22).
Y los registros seguirán mañana, tanto en el PRI como en el PRD.