Por Enrique Guevara Ayvar
La construcción greco romana construida hace más de cuarenta años en las inmediaciones del cerro de la Ropa bajo custodia del gobierno del estado de Guerrero, permanece en el abandono y bajo un litigio interpuesto por la familia del antiguo propietario, Arturo “El Negro” Durazo, lo que ha llevado a gran parte de la sociedad y prestadores de servicios al turismo de Zihuatanejo opinar que esta construcción tendría que ser abierta al público como atractivo turístico y museo de la corrupción, o museo a la impunidad.
Ayer, en un evento en el que se inauguró la colecta anual de la cruz roja, el presidente municipal interino. Homero Rodríguez afirmo en entrevista que para tratar de poner en actividad turística el inmueble, antes se le tienen que hacer ciertos arreglos para su embellecimiento y para seguridad, pero subrayo que esto tal vez este fuera de las manos del gobernador porque hay un juicio y obvio que está en litigio la propiedad dijo en entrevistado.
Sin embargo, el alcalde interino Homero Rodríguez hizo notar que la propuesta que se haga al gobernador del estado pudiera ser hecha a un Lado porque hay un juicio que pone en litigio el Partenón.
Agrego el entrevistado que por supuesto que como autoridad nos sumaremos a cualquier gestión que se haga de ese tipo siempre y cuando el estatus jurídico del inmueble lo permita tomando en cuenta que tampoco el gobernador se opondría a una cuestión de esas aunque se tendría que valorar porque el gobierno estatal son los encargados y los que tendrían que decidir que se hace con esta construcción.
Para opinar más, antes tendría que tener en mis manos una ficha técnica con fundamento legal y así poder emitir una opinión más real al respecto dijo el primer edil de Azueta Homero Rodríguez quien agrego que al tener más información en sus manos le estaría solicitando al gobernador del estado el Partenón como atractivo local para el turismo.
Homero Rodríguez reconoce que “el Partenón de Durazo proviene de una situación no muy buena” pero su estructura se pudiera aprovechar en su justa dimensión para proyectar eventos de tipo turístico, exposiciones temporales, entre otras cosas.
Dijo que el Partenón, no funciona como atractivo turístico pero llegan personas que de manera clandestina lo visitan, atraídos por el morbo de su historia negra sobre todo periodistas internacionales que preguntan por el mito que se ha generado en torno al inmueble.
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