Fernando Polanco Ochoa/IRZA
Chilpancingo, Gro., octubre 29 de 2018 (IRZA).- La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) “no puede avalar” la consulta ciudadana que ordenó el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, cuyo resultado favorece el acondicionamiento de la base aérea militar de Santa Lucia, Estado de México, en donde se construirán dos pistas aéreas.
“No podemos avalar una consulta porque no tuvo el mínimo de los requerimientos legales, decían que era por medio de una app (aplicación móvil) que ni siquiera funcionó”, criticó Joel Moreno Temelo, presidente de Coparmex.
“Hubo gente que votó hasta cuatro veces en diferentes casillas”, señaló el empresario luego de que este lunes se informó que el resultado avala la cancelación del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAICM) que se construye en Texcoco, también en el Estado de México.
Comentó que la muestra tampoco es representativa: “vemos con azoro que se habla de una participación alta cuando las boletas no estaban foliadas, hay muchas muestras de que no hubo (nutrida) participación ciudadana en las mesas de la consulta”.
La consulta ordenada por López Obrador se aplicó del jueves 25 al domingo 28 de octubre, para determinar la cancelación o continuidad de la construcción del nuevo aeropuerto de México en Texcoco o la construcción de dos pistas en la base aérea de Santa Lucía y a la vez se mantiene en operación el actual Aeropuerto Internacional “Benito Juárez” (CDMX).
Este lunes el propio presidente electo confirmó que la segunda opción obtuvo la mayoría de votos y que, en consecuencia, se cancela la construcción del NAICM en Texcoco, como lo prometió desde la campaña presidencial.
Moreno Temelo informó que la cancelación del proyecto que puso en marcha el aún presidente Enrique Peña Nieto, tendrá severas repercusiones negativas para el turismo de Guerrero y, en general, para la economía del país.
“Si el gobierno entrante da marcha atrás a la construcción (del NAICM), sería una cantidad enorme de recursos que se van a ir a la basura porque tendría que pagar compensaciones (a las empresas constructoras); se habla de más de 100 mil millones de pesos”, dijo.
Además que el Estado Mexicano perdería su ranking al generar desconfianza para los inversionistas extranjeros: “puede repercutir hasta en proyectos nacionales, como el Tren Maya, que el gobierno entrante tiene en mente, no habrá quien invierta”.
“Va a generar un caos a nuestro principal ingreso que es el turismo, no es sólo echar abajo el nuevo aeropuerto, es un tema nacional donde las inversiones se pueden ir para otro lado”, alertó el empresario.
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