- “Nos llevaría a la debacle financiera”, reconoce.
Fernando Polanco
Ochoa/IRZA
Chilpancingo, Gro., junio 10 del 2019 (IRZA).- El alcalde Antonio Gaspar Beltrán advirtió que llevaría a la “debacle financiera” al Ayuntamiento si autoriza el 10 por ciento de aumento salarial que le exigen los trabajadores de la Sección 28 del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), por lo cual, anunció, recurrirá al Tribunal de Conciliación y Arbitraje para buscar la solución de este conflicto.
Exigir el 10 o el 13 por ciento de incremento del salario base es poner al Ayuntamiento entre la espada y la pared, dijo Gaspar Beltrán.
Consideró que el TCA “ha jugado un papel muy pasivo en estas luchas sindicales” y que en muchos casos, opinó, “están fuera de legalidad”, porque cualquier suspensión laboral determinada por un sindicato debe ser notificada con antelación al tribunal, lo cual no ocurre.
A partir de la semana pasada, los trabajadores suspendieron labores para exigir originalmente un 13 por ciento de aumento salarial, aunque días después anunciaron que no aceptarían menos del 10 por ciento. Pese a eso, el gobierno de Gaspar Beltrán insiste en su oferta del 3 por ciento, de acuerdo con la Ley de Disciplina Financiera.
“Hemos sido muy tolerantes, somos un gobierno de izquierda y estamos con la base trabajadora, pero tenemos obligación y responsabilidad de hablar con transparencia y honestidad”, respondió Gaspar a través de un mensaje.
Informó que actualmente su gobierno eroga 32 millones de pesos en la nómina de 3 mil 200 trabajadores, pero explicó que en el caso de ceder ese 10 por ciento, el gasto mensual se elevaría a más de 40 millones, con lo cual “aumentaríamos el déficit financiero en 120 millones de pesos más”.
“Llegaría un momento en que los recursos de la federación con los ingresos propios no serían suficientes para pagar la nómina. Esto, aunado a las prestaciones de fines de año, porque actualmente necesitamos casi 80 millones para el pago de aguinaldos. Estaríamos hablando de un incremento de casi 100 millones tan sólo en prestaciones; no habría manera de cómo pagarles”, indicó.
Por eso Gaspar Beltrán insistió en que el incremento salarial “será parejo” y que ya no negociará por separado con los sindicatos. “Esos tiempos son parte de las políticas del pasado, donde había privilegios para ciertos trabajadores”.
Informó también que el déficit en la nómina se agravó porque la pasada administración municipal incorporó a 500 trabajadores fuera de techo presupuestal, cuyo monto equivale a más de 6 millones de pesos mensuales.
Consultado sobre el paro laboral de los trabajadores de la Sección 28 del SUSPEG que lidera Natividad Adame Martínez, Gaspar informó que este movimiento está afectando drásticamente la recaudación, por lo que pidió a los trabajadores que actúen con responsabilidad para que no afecten la hacienda municipal.
Precisamente por esa suspensión laboral, confió en que su administración no tenga que llegar a la aplicación de descuentos salariales e incluso denuncias ante la Agencia del Ministerio Público. “No podemos seguir pensando como antes en que toman calles y cierran edificios, y que mediante esa presión logran objetivos. Si lo lograran, se estaría condenando a la administración municipal a la debacle”.
Por eso Gaspar informó que en 8 meses de gobierno se han registrado tres movimientos sindicales, los cuales han dejado una merma financiera superior a los 10 millones de pesos tan sólo de ingresos propios, cuyo monto repercutirá en diciembre para el pago de aguinaldos y prestaciones de fin de año.
No obstante, el alcalde consideró que muchos trabajadores de la Sección 28 se sublevaron al liderazgo de Natividad Adame Martínez porque también aspiran a la dirigencia de ese sindicato, la cual está en vías de renovarse.
“Veo que atrás de él hay líderes que aspiran a sucederlo y aprovechan el movimiento para decirle a la gente que sí se puede y que vamos a darles el 13 por ciento (de aumento salarial), que sí hay dinero. Ya demostré que los 37 millones de pesos que ingresan son los 37 que gastamos al mes. Ponen al Ayuntamiento entre la espada y la pared, no tenemos margen de maniobra”, reconoció
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