Terrible error cometió el cabildo al ceder a los caprichos del líder de la SUTEAPASC, ya no se lo van a quitar de encima

Por Juan Fco. Barrios Valverde

Trabajadores de confianza de la CAPAZ lamentan que se haya lastimado al pueblo con aguas pestilentes y sacrificado a la población y usuarios por la falta del agua potable para beneficiar a un pequeño grupo de dirigentes de la CAPAZ cumpliéndoles sus caprichos.  
Dicen los trabajadores de confianza con muchos años de antigüedad  que los ganones de la huelga fueron los dirigentes sindicales, los perdedores el pueblo usuario del agua potable y los trabajadores de confianza que van a cobrar medio sueldo porque a los de confianza no les van a repartir la “cooperacha” que juntaron del boteo y otros apoyos que almas caritativas entregaron a los dirigentes de los huelguistas.
Pero mientras tanto personal de confianza de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Zihuatanejo se encuentran inconformes porque fue destituido el subdirector Jesús Benjamín Álvarez Orozco y manifiestan que el gobierno municipal no debió haber cedido a los caprichos del dirigente sindical.
Los empleados de confianza dijeron que los funcionarios de la actual administración deben dar una explicación porque fue destituido el subdirector ya que había trascendido que la Junta Local de Conciliación y Arbitraje iba a declarar inexistente la huelga.
Unos 30 empleados entre los que se encuentran Diana Reyes, Jorge Cervantes y Justina López, manifestaron visiblemente molestos que el único beneficiado con el conflicto fue el líder sindical, José Antonio García, “El gobierno cedió a esto y ahora no se lo van a quitar de encima, está muy crecido y ahora podría pedir la cabeza de un regidor o del presidente municipal”.
Dijeron los inconformes que se habló de que el gobierno esperaría una decisión legal por parte de la JLCA y por eso el personal de confianza estuvo trabajando durante los 18 días para intentar el suministro de agua a la población; “que fácil es para los de cabildo solucionar los problemas en el escritorio, nadie de los regidores fue un solo día a ver como estábamos trabajando o a decirles: como están muchachos que les hace falta, que piden ustedes, nunca fueron cuando es una obligación como regidores y representantes del cabildo, ver por nosotros y no solo por lo que el líder viene a pedirles”.
A su vez Jorge Cervantes, dijo que era innecesario estar golpeando a la ciudadanía por 18 días porque si se iba a ceder debieron hacerlo desde el primer día “que se hubiera ido quien se tuviera que ir porque no hubo pruebas para haberlo lanzado; yo no veo que se haya negociado la cabeza de nosotros que nos venimos a apoyar a la empresa donde nosotros tenemos 23 años trabajando; golpearon a la sociedad y da tristeza que hayan hecho un convenio donde le pagaron a la sociedad y a nosotros como trabajadores”.

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