LAS DENTELLADAS

Por El Tiburon

El Hospital de Vallecitos, reflejo de la ineficiencia y la corrupción

Atención camaradas: Esta colaboración la escribo con la esperanza de que, alguno de ustedes, que suelen tener contactos en las altas esferas de la polaca, haga llegar esta historia a manos del doctor José Angel Córdoba Villalobos, secretario de salud del gobierno federal, a ver si él es capaz de poner un alto a tanto desorden, a tanta ineficiencia, a tanta corrupción, a tanta falta de compromiso con el pueblo de México.
Trato este tema, a propósito de una nota publicada por este diario el día de ayer, donde informa que el coordinador de desarrollo social del gobierno de José Azueta, Jorge Allec Maciel, se llevó a un señor que se llama Mario Baranda, quien vino a estas tierras como representante del encargado de despacho en la Secretaria de Salud Guerrero, Rubén Padilla Fierro, a Vallecitos de Zaragoza para rogarle que por el amor de Dios terminen de adecuar el “Hospital” de Vallecitos de Zaragoza y que manden el personal que se requiere por que no ha podido dar servicio como tal desde hace más de cinco años que se equipó y más de siete que se construyó.
Fíjese lo que son las cosas, este llamado “hospital” de Vallecitos inició su construcción durante el último trienio que gobernó Jorge Allec Galeana (1999-2002). Ocho años después (¡¡OCHO AÑOS DESPUES!!) anda su hijo, Jorge Allec Maciel, tratando de que el gobierno del estado destine recursos para poner en marcha este elefante que algún día fue blanco.
Se terminó el gobierno de René Juárez, ya casi expiró también el de Zeferino Torreblanca y nada. Aquí, después de Jorge Allec padre, ya desfilaron Amador Campos y Silvano Blanco. Llevamos un año bajo el gobierno de Alejandro Bravo Abarca y nada. Esto, camaradas sólo puede ocurrir en México.
En enero del año 2003, El Sur informó que Amador Campos anunció que exigiría a René Juárez y a Verónica Muñoz, entonces secretaria de salud, la terminación y equipamiento del “hospital” que fue mal construido, según dijo. Siete años después, funcionarios siguen buscando que el gobierno del estado destine recursos para adecuar la construcción y mande al personal especializado que se requiere.
Al parecer desde el año 2005, el edificio se encuentra equipado, muy probablemente con fondos que no provinieron totalmente de las arcas de los gobiernos estatal y municipal. Paréceme recordar por ahí una donación de instrumental hecho por personas de los Estados Unidos. Pero no pueden usar un aparato de rayos X (no está en condiciones el local para controlar la radiación) una unidad de emergencia y el quirófano, entre otros equipos, mientras que la comunidad de Vallecitos y pueblos circunvecinos requieren urgentemente del servicio. Vaya usted a saber cuántos vecinos habrán estirado la pata mientras René Juárez y Zeferino Torreblanca han estado pensando si apoyan o no apoyan.
En el año 2005, la prensa estatal informó que la actual administración estatal (ya la de Zeferino) no tenía recursos económicos para pagar médicos, anestesiólogo y enfermeras y cubrir los gastos de operación.
Uno se pregunta ¿por qué no es posible que el gobierno del estado resuelva un problema que aparentemente no es tan difícil? ¿De veras no han tenido recurso a lo largo de más de 7 años? Si no tenían recurso, ¿por qué autorizaron su construcción?
Vaya usted a saber cuàntas dificultades habrán enfrentado para poner en marcha este “hospital”, pero seguramente muchos de los problemas han de estar relacionados con la calidad, el tipo de funcionarios que han tenido y tienen en sus manos este asunto. El sitio de internet Globedia.com.mx publicó el 20 de octubre de 2009 una nota en la que habla de los funcionarios del sector salud. El subtítulo dice: “Corrupción, desvío de recursos y venta de medicamentos”.
La nota afirma que en esas fechas el actual encargado de despacho en la secretaria de salud Guerrero,, Rubén Padilla Fierro se encontraba involucrado en un escándalo sexual y que esperaban que lo salpicara el caso de corrupción que por la venta de medicamentos y el desvío de recursos económicos se cometieron en la construcción de los hospitales de Coyuca de Benítez, Chilpancingo y Centro de Salud comunitaria en el municipio de Ometepec.
En todos los casos –sigue diciendo la nota- están involucrados no solamente Padilla Fierro sino que la acusación y el señalamiento involucra a Angélica María Ramos, subsecretaria de Administración y Finanzas, al ex titular de Comunicación Gonzalo Castañón, el hermano del Secretario Particular del jefe del ejecutivo Cesar Bajos Valverde, José Antonio de los mismos apellidos así como al administrativo de la Secretaria de Salud, Mariano Ochoa. ¿Cree usted que este tipo de pelaos van a resolver algún día el problema de Vallecitos? Y otra pregunta: ¿Por qué no los habrá corrido y encarcelado Zeferino?