EN POCAS LINEAS

Por Abelardo Abarca Rendón

José Antonio García Hernández, alias “el chile vele”, líder en decadencia del sindicato de trabajadores de la CAPAZ, recuerda con nostalgia los trienios del PRD, cuando él y su camarilla, no los miembros de esa agrupación sindical, disfrutaban de las prebendas y canonjías que obtenían del organismo operador del agua, mediante las amenazas de paros y huelgas, de lo cual dieron cuenta en su tiempo los periódicos de la región.
En aquel entonces y durante casi seis años, el sedicente dirigente prácticamente saqueó a la CAPAZ, por el pago de gastos “sindicales”, de los cuales nunca rindió cuenta y razón a los agremiados, sin tomar en cuenta que metió a laborar en esa empresa a casi toda su parentela con sueldos elevados y, sin demostrar la capacidad para desempeñar los cargos detentados, mientras que el demás personal, también sindicalizado, obtenían prestaciones miserables.
Antaño, o sea en tiempos de gloria del “chile vele” cuando gobernaba el partido amarillo, si la administración demoraba unas horas, no un día o una semana, en pagarle los sueldos o cualquier otra prestación, éste sin respeto alguno, se introducía a las oficinas de los directivos de la paramunicipal y les exigía el pago de ese numerario, amenazándolos con hacer paros, y siempre lograba sus requerimientos, aunque su postura no fuera la adecuada, pues en sus desplantes de grandeza o ignorancia solía decir “que conocía más que un licenciado laboral”.
Hasta ayer martes, los miembros del sindicato lidereado por el sujeto de marras, no han cobrado la segunda parte del aguinaldo, los vales de despensa, la prima vacacional, les quitaron la afiliación al seguro social y amenazan con despedir a más de cien trabajadores, mientras que Toño García, se ha cruzado de brazos, refunfuñando por haber casi obligado a los afiliados a apoyar al partido tricolor en las pasadas elecciones municipales. Es todo.