D’ grilla, grillos y algo más

¡Ufff! Aunque me duela aceptarlo, ahora entiendo por qué dicen que las mujeres no deberíamos salir de la cocina; nomas vean el desmadre que armó Beatriz Paredes con la designación de su candidato, de disque unidad. Está por demás decirlo, pero todos sabemos que la señora del huipil y el jorongo se vio más que obligada a palomear a Manuel Añorve como candidato, pues alguna poderosa razón debió tener para no pelearse con los dueños del PRI en Guerrero.
A mí no me lo crean pero dicen que prefirieron hacer su malovada antes que irse a una elección interna, pues aseguran que las encuestas ponían a Ángel Aguirre, diez puntos por encima de Manuel Añorve. De lo que sí estoy segura es que para tomar una decisión de ese tamaño deben hacerlo con encuesta en mano. La bronca ahora es que esos 10 puntos no le alcanzan al Ángel caído para que el PRD lo cobije como candidato de la coalición “Todos Contra el PRI”. Convergencia, el PAN, el PT, el Partido Verde y tooodos los partidos “Mi Alegría”, felices de la vida de que Aguirre Rivero sea su candidato, pero los amarillos tienen a su Ríos Piter y no fácilmente van a permitir que un priista resentido venga muy cómodo a comerle el mandado. Y meeenos un priista, que como  Eric, ve en el tricolor su  empresa familiar, pues ya ven tiene hermano diputado, actualmente él es senador y ahora quiere la gubernatura y al rato, no duden, que vaya a querer que Beatriz Paredes le dé a su hermana. Si esto está pasando en el Estado, imagínense lo que sucedería si la lideresa se encapricha con imponernos a su candidato para la próxima contienda?! Porque precisamente de situaciones como esta, es de lo que se aprovechan los perredistas para salirse con la suya. Ángel Aguirre ya no tiene nada que perder; pero si quiere conservar lo que tiene tendrá que enfrentar a un René Juárez región 4 y a un Rubén Figueroa remasterizado que vienen más rencorosos que nunca. No cabe duda que en el Estado como en este municipio se están desempolvando viejos rencores; en el 2012 habrán de cobrarse añejas cuentas, con altísimos intereses. Llegó el momento de demostrar quién es quién.
Pasando a cosas peores, ahora resulta que Marcelo Ebrard exigió una disculpa pública a los jerarcas de la Iglesia Católica que lo acusaron de sobornar a la Corte para que aprobara los matrimonios y la adopción para homosexuales en la Ciudad de México. Y es que, con justa razón los monarcas religiosos se fueron con todo en contra del jefe del gobierno capitalino, pues se oponen a las bodas gay bajo el argumento de que atentan contra la familia, y más aun en contra de las adopciones, que aunque no lo dijeron, en lo particular me parecen un infanticidio. Hugo Valdemar, vocero de la arquidiócesis primada de México, de plano dijo que las políticas impulsadas por el gobierno del Distrito Federal son más peligrosas para la sociedad que el narcotráfico. Como dijo Jack el Destripador, vamos por partes. Marcelo Ebrard tiene toooda la razón en argumentar que los ciudadanos tienen derechos, y está perfecto que los gays tengan derecho a legalizar su unión a través del matrimonio. Pero de eso a que adopten a un bebé un par de homosexuales, ya es otro asunto. Si en la actualidad se ve caaada cosa y eso que los hijos son criados dentro de hogares donde hay un papá con pantalones y una mamá con falda o solo está la mamá, también hay casos donde solo hay papá; y aun así tenemos una sociedad podrida, ahora imagínense lo que pasaría con los hijos de matrimonios donde la mamá tiene pene y el  papá vagina… ¡Qué horror!
Bueno, la cosa es que mientras Ebrard se hacía pedazos con los obispos y arzobispos por este asunto que para los jerarcas católicos resulta abominable, mientras para él representa solo un asunto de constitucionalidad; aquí el diputado federal, Amador Campos Aburto,  trataba de persuadir a la concubina del ex presidente de Petatlán, Antonio Armenta Miralrio, para que se desistiera de una demanda puesta en contra del ex edil, por violencia intrafamiliar. Se imaginan a un diputado que se encarga de representarnos y defendernos; de presentar iniciativas y aprobar reformas a la ley, supuestamente a favor de los ciudadanos, de los niños y nosotras las mujeres; defendiendo a un misógino, traicionero, infiel, adultero, golpeador y cobarde. Qué culpa tenemos nosotras, que a las mujeres de su partido les guste que las golpeen.  Bien por Mónica que tuvo el valor de defenderse y denunciar a su agresor aun cuando se trata de un personaje poderoso, faltaba menos!