MEMORÁNDUM

Por Gerardo Ruano Cástulo

*** Habilidad de Luis Román ante déficit en ISSSPEG

Ante el enorme déficit financiero que arrastra el Instituto de Seguridad Social de los Servidores Públicos del Estado de Guerrero, por sus siglas ISSSPEG, su director, Luis Román Miranda, tiene que hacer gala de habilidad y tacto político para que el barco se mantenga a flote.
Así es. Según los datos que tenemos, las diferentes instituciones, léase ayuntamientos y organismos públicos descentralizados, adeudan al ISSSPEG poco más de 80 millones de pesos, por concepto de aportaciones.
El problema del Instituto es grave, porque más allá de los beneficios que pueden recibir los trabajadores que están en activo y que cotizan, el sistema de pensiones amenaza con colapsarse. Tan es así, que en los últimos dos años se ha venido hablando de la urgente necesidad de reformar la ley que da vida al ISSSPEG, la cual, algunos han intentando politizar, sin reparar, en que este asunto podría ser impostergable. Caso contrario, las consecuencias serían pagadas por los mismos trabajadores.
El caso es, que Luis Román recibió una dependencia prácticamente al borde de la quiebra, y luego entonces, su llegada se entiende con el objetivo de revertir esa situación desastrosa. Más aún, cuando se le etiqueta como un aliado de los trabajadores que cotizan en la institución.
No podemos olvidar, que antes de asumir las riendas del Instituto, el nuevo director se venía desempeñando como representante del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero, por sus siglas SUSPEG, ante la oficina que hoy encabeza. De ahí, que su compromiso parece ir más allá de arreglar la casa en aras de que el gobierno aguirrista se lleve los bonos. Lo que se ve, es que Luis Román tiene sobre sí, el compromiso de garantizar que el Instituto tenga finanzas ordenadas, porque de esa manera, los trabajadores podrán seguir gozando de los beneficios y el sistema de pensiones estará garantizado.
Luis Román tiene que hacer gala de su tacto y oficio político. Así como lo ha hecho con el alcalde de Taxco de Alarcón, Alvaro Burgos Barrera, con quien el día de mañana, allá en la ciudad platera, habrán de firmar un convenio, por medio del cual el Ayuntamiento se comprometerá a ir pagando de manera gradual, los poco más de Tres millones de pesos que adeuda al ISSSPEG por concepto de aportaciones que en su momento no ha depositado.
Esa misma chamba seguramente hará con otros alcaldes, entre los que se encuentra el de Acapulco, Manuel Añorve Baños, cuyo Ayuntamiento debe al Instituto más de Once millones de pesos, y en ese mismo municipio, la Capama adeuda alrededor de 50 millones de pesos, ubicándose en el primer lugar de la lista de deudores al ISSSPEG.
También se encuentran en esa lista, el ayuntamiento de Iguala con más de Ocho millones de pesos, y el de Chilpancingo, con más de Siete millones de pesos. Eso explica, entre otras cosas, porque la entrega de préstamos a los trabajadores se ve limitada. 
Con esa situación complicada le ha tocado lidiar a Luis Román. Ante ello, la firma del convenio con el alcalde de Taxco envía una buena señal para quienes cotizan al Instituto. Porque eso significa que existen actores políticos que saben y entienden de la gravedad del problema y que es urgente que el ISSSPEG se haga de recursos.
Ese hecho, también envía una clara señal, de que el director está haciendo gala de sus buenos oficios, en aras de mejorar las condiciones de la Institución, a efecto, hay que decirlo, de que sirva a los trabajadores, quienes, en caso de un colapso del ISSSPEG, serían los más afectados por el déficit financiero. Esa es la cuestión.
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