MEMORÁNDUM

Por Gerardo Ruano Cástulo

*** Afiliación Ángel Aguirre fortalece a PRD.

Lo dijo, se comprometió y lo cumplió. Así es. El Gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero ya es militante del Partido de la Revolución Democrática, por sus siglas PRD, y sin duda alguna, su incursión viene a fortalecer a dicho instituto político, desde diferentes aspectos y circunstancias. 
De entrada, la afiliación da la certeza al PRD, de que Ángel Aguirre cumplirá con su compromiso de hacer un gobierno apegado a los principios e ideales de la izquierda. Un gobierno cercano a la gente y con mucha solidaridad para con los que menos tienen. Del mismo modo, refrendaría con ese acto, la inclusión en su gabinete de militantes perredistas, pero no para cumplir con el compromiso simple de campaña, sino para cerrar filas en torno a un proyecto en común. Porque después de su afiliación, si le va mal al gobernador y a sus funcionarios, las repercusiones las pagaría el pueblo, quien se las cobraría por completo al PRD. Caso contrario, si las cosas salen bien, serán ellos precisamente los fortalecidos y más beneficiados en la próxima cita electoral.
De hecho, durante su primer discurso como perredista, el Gobernador Ángel Aguirre anunció que no habrá de crear una nueva corriente al interior de su partido, lo que envía un mensaje de que no abonará a la división. Más aún, se habría pronunciado por la unidad a efecto de que vayan con todo en las elecciones del 2012. Evidentemente al mandatario estatal le interesaría no solamente aportar votos para la elección de presidente del país, sino lograr que el PRD refrende su triunfo en la entidad suriana, ganando la mayoría de ayuntamientos y tenga el control del Congreso del Estado.
Desde esa perspectiva es claro el mensaje que el Gobernador envía a quienes lo apoyaron desde el denominado Movimiento Ciudadano, en el sentido de que si logran encumbrarse en candidaturas respaldadas por el PRD gozarán de todo su apoyo. Ahí está como ejemplo la secretaria de educación, Silvia Romero Suárez, a quien ya desde ahora, se le perfila como futura candidata en el municipio de Iguala y con demasiadas posibilidades de ganar. Y cuya aspiración hoy luce sumamente fortalecida por su afiliación también al PRD.   
En ese sentido, es evidente que Ángel Aguirre iría con  todo en las elecciones del 2012.  Así también lo refleja su llamado a la dirigencia estatal de su partido, a efecto de que mantengan la alianza con el PT y Convergencia, lo que traducido al castellano, significaría que quiere ganar Acapulco con la candidatura única del senador Luis Walton Aburto. No desearía que se repitiera la historia de 2008, cuando Perredistas y convergentes se fueron separados y le abrieron las puertas al PRI que hoy gobierna en el municipio porteño.
Éste acto del Gobernador, también viene a callar a esas bocas que decían que solamente había engañado al PRD con eso de su afiliación. No podemos olvidar, que le cuestionaban luego de que terminara el mes de abril y no se había concretado su compromiso de sumarse a las filas perredistas. Y hasta aseguraban que al PRD le pasaría igual o peor que durante el Zeferinato.       
Lo cierto es, que para envidia de sus detractores su afiliación al PRD es una magnifica señal para ese Instituto Político, como no lo es, tal vez, para el Partido Revolucionario Institucional, por sus siglas PRI. Y no lo es,  porque mientras en el tricolor se desgastan lamentándose por el pasado y buscando culpables, no han comenzado el proceso de reconstrucción y reconciliación. Y a diferencia de ello, el Gobernador ya le abre una opción clara a todos aquellos que ahora son rechazados desde el PRI.
Por donde se vea, la afiliación de Ángel Aguirre, en su calidad de gobernador y con una presencia importante e impactante en la entidad, viene a fortalecer enormemente a un PRD, que hasta un hace año, algunos ya daban como casi muerto. Esa es la cuestión.
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