OPINIÓN

Por Manuel Tello Zapata.

Apoyo a periodistas

El Gobernador del Estado Ángel Aguirre Rivero, le está dando un impulso sin precedente al apoyo para los periodistas como no se había visto desde que gobernó nuestra entidad el Finado José Francisco Ruiz Massieu. El brazo ejecutor para estas acciones es la Maestra Beatriz Mojica Morga, Secretaria de Desarrollo Social, que como comunicóloga que es, cumple a cabalidad y con buen ánimo estas acciones.

Como muestra de lo anterior está la Décima Convención Estatal de Periodistas que se realizó en la ciudad de Taxco de Alarcón, a la que asistieron un gran número de comunicadores, que fueron atendidos en forma personal por la funcionaria quien -al inaugurar el evento- ratificó el respeto irrestricto del Gobernador, a la libertad de expresión.

Por otra parte, el Fondo de Apoyo a Periodistas está reconvirtiéndose con el trabajo de la Maestra Mojica Morga, para ser un auténtico ente que facilite el trabajo periodístico con beneficios que contemplan: desde la construcción de casas para comunicadores, seguros de vida, hasta la realización de cursos y seminarios que permitan actualizar el conocimiento de los periodistas locales.

RETORNO EXITOSO

El dirigente de la sección 14 del SNTE, José Hilario Ruiz Estrada, retornó del Congreso Nacional de ese sindicato, donde se ratificó en el cargo a la Maestra Elba Esther Gordillo, fortalecido por la unidad que se respira entre los consejeros guerrerenses que asistieron al acto, y con más deseos de trabajar en beneficio de los Maestros.

Desde que asumió el cargo, Ruiz Estrada ha estado practicando una política de acercamiento con los maestros de la CETEG, ya que considera que todos los trabajadores de la educación son como hermanos y respeta los espacios que le corresponden a esa expresión sindical. Esto ha permitido aminorar las controversias reduciéndose los conflictos, algo que se palpa en el ambiente magisterial.

EL DOLOR DE EL PEJE

Muy opacada estuvo la visita realizada por el ex candidato presidencial de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador a Chilpancingo, donde no más de cien personas lo acompañaron en la reunión de trabajo que sostuvo con miras a conformar el Partido Movimiento de Renovación Nacional (MORENA).

Totalmente resentido con las instituciones nacionales, porque sigue considerando que le robaron la elección, El Peje lanzó duras diatribas en contra de los dirigentes sindicales del Magisterio y de los petroleros, Elba Esther Gordillo y Carlos Romero Deschamps respectivamente, por haberse reelegido por otros seis años.

Andrés Manuel los acusó de todo: caciques, explotadores del trabajador mexicano, rateros del presupuesto, etc.. Sin embargo, durante su visita al Congreso de la Unión para hablar con los Senadores de izquierda, El Peje se mordió la lengua y todavía no la encuentran, al hacerse acompañar por uno de los peores dirigentes sindicales, el que más reelecciones suma en su haber y más tiempo tiene viviendo de los trabajadores: Francisco Hernández Juárez, líder vitalicio del sindicato de los telefonistas, quien tiene más de 26 años como su dirigente.

Aunque El Peje afirma que no quiere quitarle militancia al PRD, se debe entender lo contrario. Odia a los dirigentes de ese partido y buscará desaparecerlo del mapa; pero por lo menos en Guerrero no se saldrá con la suya a juzgar por los últimos acontecimientos, ya que el PRD continúa siendo una fuerza con gran presencia y no le ha quitado ni una pluma el boxeador callejero Andrés Manuel López Obrador.

El ex candidato presidencial de las izquierdas sufrió ayer un duro revés con la reunión celebrada entre el Presidente electo Enrique Peña Nieto y los gobernadores de extracción perredista en funciones, Ángel Aguirre Rivero (Guerrero); Gabino Cue (Puebla), y los gobernadores electos: Graco Ramírez (Morelos), Arturo Núñez (Tabasco) y el nuevo Jefe de Gobierno del Distrito Federal: Miguel Ángel Mancera.

Como auténticos estadistas, estos mandatarios asistieron a la reunión sin abrigar resentimientos, sin tirarse de alfombras ante el nuevo Presidente de la República; movidos más que nada por un afán de servirle a sus pueblos de la mejor forma, y encontraron a un Peña Nieto receptivo a sus peticiones, dispuesto a trabajar con ellos sin tomar en cuenta banderías políticas.

Todos los gobernadores perredistas acordaron asistir a la toma de posesión del Presidente Peña Nieto sin falsos rubores, conscientes de que no se puede cambiar el status y asumiendo una actitud madura, reflejando con esto sus buenas prendas políticas. No cabe duda: serán excelentes mandatarios, alejados de los extremismos que practica López Obrador, quien les debe estar recordando a su progenitora, calificándolos en cortito mínimo como traidores a la causa.