Los dos cuerpos fueron encontrados ejecutados a balazos y estaban en estado de putrefacción, la tarde de ayer lunes, y la mañana de hoy cada uno de sus familiares lograron identificarlos sin temor a equivocarse.
El
siguiente material contiene imágenes que
pueden ser sensibles para algunas personas *Se recomienda discreción*
El primero fue identificado como Leonardo Espíritu Abundis de 33 años de edad, quien había sido policía del estado y actualmente desde hace varios meses se ganaba la vida conduciendo la camioneta Nissan tipo estaquita del servicio público con número económico 134 de Chilpancingo.El ahora occiso contaba con dos domicilios el primero de ellos en la manzana 7, lote 10 de la calle «Eucalipto» de la colonia «Las Palmas» y segundo en el asentamiento humano «Balcones de Tepango» ambos de esta capital.
El padre del ahora occiso Leonardo Espíritu Pimentel, originario de la comunidad El Potrero, municipio de «Juan R. Escudero» dijo ante las autoridades que el día 2 de febrero de este mismo año como es costumbre su hijo salió desde muy temprano a trabajar a bordo de la mixta y durante ese día y parte de la noche no retornó.
Al pasar las horas empezaron a preocuparse y al no saber de su paradero de Espíritu Abundis interpusieron una denuncia por el delito de desaparición de persona.
Agregó el padre del ahora occiso que al darse cuenta que el día de ayer lunes cerca de las 18 horas sobre la carretera que conduce a San Vicente, municipio de Chilpancingo, cerca de la comunidad de Coapango, y en el punto conocido como El Espantarrín habían encontrado dos cadáveres y que estaba siendo devorados por aves de rapiña a la vez presentaban varios tiros en el cuerpo de pistola calibre 9 milímetros.
A las 8:00 de la mañana de hoy martes, se trasladó hasta la morgue de esta ciudad capital, donde pidió ver los cadáveres, con tristeza le dijo al médico legista que la persona que se encontraba en esa plancha y que vestía una camisa de manga larga azul bajito, un pantalón de mezclilla azul y unos botines de piel color negros era su hijo.
Al referirse sobre la conducta de su hijo comentó que era un muchacho tranquilo y que no le hacía mal a nadie y que hace aproximadamente cinco meses renunció a la policía del estado y que en estos momentos se ganaba la vida manejando una mixta.
Mientras que el segundo cuerpo fue identificado por su esposa, cuando eran cerca de las 11 horas de hoy martes, quien señaló que respondía al nombre de Víctor Javier Saldaña Aparicio de 34 años de edad, con domicilio en el andador 2,manzana 3, lote 04, de la colonia San Rafael Oriente de Chilpancingo.
El desafortunado trabajador del volante vestía una playera blanca, un pantalón azul de mezclilla y unos tenis blancos.La ahora viuda señaló ante las autoridades que su esposo se encontraba desaparecido desde el día 26 de enero, y externó que desde muy temprano ese día salió a trabajar conduciendo una camioneta mixta del servicio público de modelo reciente y que durante la tarde regresaba a comer.
Externó que durante ese día, ya no regresóy fue hasta hoy martes por la mañana a través de su ropa que lo pudo identificar.
Asimismo ambos cadáveres de taxistas, se presume que antes de matarlos a balazos, estuvieron varios días en una casa de seguridad en donde los habrían torturado y después se los llevaron rumbo a la carretera a Amojileca para dirigirse hacia la comunidad de San Vicente, y en un lugar a despoblado los privaron de la vida.
El médico legista determinó que en los momentos en que fueron encontrados los cadáveres, llevaban por lo menos tres días de que habían sido asesinados, por lo que ya estaban siendo devorados por aves de rapiña.
Por último informaron los familiares que hasta el día de hoy no han encontrado las dos unidades motrices del servicio público (ANG).
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