*** Ángel Aguirre; tres años sorteando obstáculos
La tarea de gobernar no es cosa fácil. Mucho menos cuando los rezagos son enormes y los presupuestos son limitados. Tampoco lo es, cuando se sabe que los detractores están prestos para orquestar ataques y señalamientos para llevar agua a su molino, porque detrás de muchas de esas posturas se esconde el verdadero interés por el poder. Con todo eso, más los fenómenos naturales que han golpeado a Guerrero, ha tenido que convivir el Gobernador Ángel Aguirre Rivero, quien mantiene su enfoque firme, en la ruta de aportar para mejorar los índices de desarrollo humano que privan en la entidad.
Así es. En unos cuantos días, el Gobernador Ángel Aguirre cumplirá tres años en el poder. De su segunda etapa como mandatario estatal. Evidentemente, el camino no ha sido fácil. Para ser sinceros, ha sido lleno e inundado de obstáculos. Pero en medio de todo eso, ha emergido la figura de un político, que no solamente ha mantenido el barco en pie, sino firmeza en el proyecto que se ha trazado.
Hoy, en cualquier parte del mundo, las necesidades de la población son superiores a los presupuestos gubernamentales. Algunos hablan del milagro Chino, pero detrás de ese “fantástico” desarrollo económico se habla de la terrible explotación en que viven miles de habitantes de ese país, cuya estabilidad podría estar en riesgo ante un eventual movimiento social.
En Estados Unidos, lugar que durante muchas décadas ha sido considerado por varios de nuestros paisanos como “la tierra de la oportunidad”, y que por esa razón se han arriesgado a cruzar la frontera, enfrenta graves problemas económicos, ante el brutal endeudamiento que padece. ¿Cuánto ha gastado en los últimos años en hacer la Guerra, para dizque pacificar al mundo?
La situación actual, nos indica que la tarea no es cosa fácil. Mucho menos cuando surgen imprevistos como los fenómenos naturales. Los grupos delincuenciales se han hecho fuertes. Y para sumarle, los detractores están prestos para atacar, en aras de crear desgaste y mala imagen al gobierno, para venderse como una oferta que supuestamente podrá erradicar todos los males.
En el caso de Guerrero, los últimos tres años han sido llenos de obstáculos para el gobierno del estado. De hecho, el panorama se veía complicado cuando asumió el poder Ángel Aguirre. El apoyo a los que menos tienen se había visto limitado en el sexenio anterior. No había programas sociales especiales, y la asistencia social prácticamente era inexistente.
Acapulco, el municipio más grande e importante del estado, no solamente padecía por la elevada violencia e inseguridad, sino también por la falta de promoción turística, con base a un plan claro de acción.
Sería mezquino, dejar de reconocer que el enfoque firme del gobernador en materia de asistencia social y programas sociales se ha mantenido. Y que, durante los últimos tres años, Acapulco ha sido sede de muy buenos eventos que han traído periodos de una enorme afluencia turística.
Los sismos, huracanes y tormentas han dejado saldos con daños enormes en el estado, y en medio de eso, el Gobernador ha venido sacando a flote el barco, a pesar de que sus detractores no ayudan e insisten solamente en cuestionar para llevar agua a su molino. El Gobierno Aguirrista, se debe medir en forma integral y de acuerdo a las circunstancias que le está tocando vivir. Y en ese sentido, sería mezquino dejar de reconocer, que durante los tres años, los aciertos han sido muchos. Su apertura política y presencia constante en todas las regiones del estado es una señal clara de esto. Esa es la cuestión.
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