Pírrica la convocatoria del PRI municipal de Atoyac de Álvarez, para la reafiliación

Por Jorge Luis Falcón Arévalo, corresponsal
De no ser por los grupos de simpatizantes del síndico procurador Isaías Eduardo Gómez Osuna y del director de Capasma, Guadalupe Noel Pino Pérez, ambos ligados a hombres y mujeres posesionados dentro del PRI estatal, las oficinas del Partido Revolucionario Institucional (PRI) local, estuvieran  desoladas en el momento de la convocatoria, donde el escaso número de tricolores fue la nota de ese organismo político.

Desde hace algunas semanas la convocatoria del PRI estatal a través del dirigente Cuauhtémoc Salgado Romero, hacia sus simpatizantes en el sentido de “concretar reafiliación en ese instituto político”, para estar preparados para el próximo proceso electoral el llamado a las “fuerzas vivas” del verde, blanco y rojo, en esta comarca cafetalera es mínima, según al decir de priísta de abolengo y de antaño, quienes no concuerdan con las políticas del joven incipiente Jair Pérez Gallardo.
El número visto allí no era más que el personal cercano al dirigente del comité municipal, alrededor de diez gentes (empleados del ayuntamientos comisionados al PRI), de los amigos, simpatizantes y curiosos, sin faltar las presencias de los ex presidentes del comité municipal Gustavo Villegas Hernández y  Candelario Santiago Solís, un preocupado Fredi Barrera Méndez, el regidor Moisés Castro Valdés, entre otros.
Al decir, de mujeres del tricolor que no han sido invitadas a este tipo de trabajos del PRI, destacan que “hay un enorme bloque y que se ha creado un gran divisionismo dentro de las filas del tricolor, que de seguir en esas prácticas llegarán a las elecciones divididos y fraccionados. Pero además, se requiere de un gran dirigente con experiencia, convocador, respetuoso, pero además que conozca a los que le han dado fuerza a este instituto político.
Por otro lado, allí mismo de los simpatizantes y curiosos invitados destacan que no “no hay experiencia en el nuevo presidente del comité municipal del PRI y que obedece a más bien “al priismo de Manuel Añorve, que al de Peña Nieto”. Pues, “no se ve un PRI unido, sino un PRI de farsa”