El comercio, aún en sus formas más simples -como el comercio ambulante y el comercio casa por casa de productos elaborados en forma casera o artesanalmente-, es una actividad positiva pues ofrece a gente de escasos recursos la posibilidad de ganar algo de dinero que, de otra forma, no podría llegar a manos de ese trabajador y de su familia y crearía un problema para la comunidad y el estado, explicó Jorge Allec Maciel, Coordinador Municipal de Nueva Izquierda, corriente política del Partido de la Revolución Democrática.
Las REDES saben –prosiguió- que es más notorio en las grandes ciudades que el comercio “entra al quite” creando fuentes de trabajo que no sólo benefician al trabajador-vendedor, sino que innumerables empresas manufactureras salen adelante gracias al vendedor que ofrece, camión por camión, casa por casa o en la calle, una mercancía que de otra forma simple y sencillamente no podría colocarse en el mercado, indicó.
Aseguró que para él y las REDES CIUDADANAS el comercio es pues un elemento social de la mayor relevancia pues su ejercicio genera bienestar económico, junto con la industria, la producción agropecuaria, la pesca y la prestación de servicios. Y sin embargo hoy en día, para que el comercio se desarrolle plenamente, se requiere que se lleve a la práctica bajo normas muy claras que permitan la realización en el mercado de bienes y servicios, pero que a la vez brinde los espacios para que el resto de las actividades humanas se lleven a efecto con normalidad.
Añadió que el rol del gobierno es precisamente arbitrar el proceso para que todo se lleve a cabo bajo un elemental concepto de justicia y de libre competencia entre los comerciantes y con mucha lealtad hacia los consumidores; partimos de que el gobierno nos representa o debe representar a todos.
En una ciudad como Zihuatanejo, el rol del gobierno en el tema al que nos hemos referido, consiste en organizar los espacios para el ejercicio del comercio, en el entendido de que aporta beneficios a la sociedad y que por ello no debe ser visto como una actividad a la que hay que perseguir. Todo comerciante tiene que ser visto por la autoridad con respeto.
Y sin embargo, a pesar de su importancia, el comercio tampoco puede avasallar al conjunto de la sociedad; tiene que someterse a la reglamentación y al respeto de los espacios dispuestos por la sociedad para otros fines que tienen que ver con el esparcimiento, el descanso, la convivencia e incluso con la expresión cultural y artística de la comunidad.
El rol del gobierno que tome el timón del municipio a partir de 2015, consistirá –en relaci{on a este tema- en organizar, distribuir y proteger los espacios que se haya dado la ciudad, por tanto no deberá alentar ni permitir la invasión de áreas destinadas a la recreación familiar y comunitaria, pero siempre otorgando a los comerciantes los espacios y el apoyo necesario para que la actividad económica se realice con éxito para la sociedad que somos todos, externó.
Terminó diciendo que “Para que esto pueda realizarse exitosamente, será indispensable planear con responsabilidad el desarrollo urbano de Zihuatanejo, normar la distribución territorial hecha con todo el respaldo de la sociedad a través de los Consejos Populares y garantizar que la normatividad se cumpla sin permitir el favoritismo ni la corrupción”.
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