MEMORÁNDUM

Gerardo Ruano Cástulo

*** Incentivar la productividad; acierto del Gobernador.

La entrega de apoyos para proyectos productivos es una magnifica inversión. Y lo es, porque su objetivo central es incentivar el crecimiento de las personas. De hecho, la asistencia social sin nada a cambio, puede fomentar la pereza y el conformismo; dos cánceres que laceran la existencia. En cambio, apoyar e incentivar la búsqueda del sustento y la forma de cómo ganarse la vida, es algo que educa, forma y estimula. 

Así es. Uno de los rubros, en los que mayor interés ha puesto el gobernador Ángel Aguirre Rivero, y su esposa, presidenta del DIF Guerrero, Laura del Rocío Herrera, es la aportación a favor de los proyectos productivos, que va más allá de la simple entrega de apoyos, y la cultura paternalista que tanto daño ha hecho a nuestros pueblos.

Es cierto, y lo hemos comentado, existen grandes rezagos en la entidad. La pobreza se respira por todos los municipios. La necesidad alimentaria es también una prioridad y por eso no es criticable la entrega de despensas y la apertura de cocinas comunitarias, porque los niños y adultos mayores requieren de ese apoyo especialmente. Además de esto, ante el escenario de tantas carencias, se impone la presencia de un gobierno sensible y solidario, como ha sido el Aguirrista.

Durante el tiempo de gestión de la actual administración estatal, los hechos hablan de un gobierno itinerante. O sea, que no solamente se ha concretado a generar apoyos para los que menos tienen, sino que se ha distinguido por estar en todas las regiones y todos los municipios del estado. Es más, si algo se puede decir del Gobernador y su esposa, es que ambos han invertido muchas horas en estar en contacto directo con la gente, y cerciorándose de que la inversión llegue hasta donde deba llegar.

En esa labor, la asistencia social no se ha reducido a entrega de láminas, despensas, aparatos funcionales, pensión a los adultos mayores y apoyos para las madres solteras, entre otros, sino que se ha priorizado además, el apoyo a la productividad. Es decir, se ha venido estimulando y echando la mano a quienes desean comenzar alguna actividad que les genere un ingreso. Por donde se vea, eso es mejor, que aplaudirles por estirar la mano.

Mucho se ha dicho que faltan oportunidades. Y ante eso, es bueno que el gobierno Aguirista, tenga como prioridad, apoyar a quienes tienen la intención de echar a andar un proyecto productivo. No hablamos de que eso resuelva la vida de las personas. Más una cosa sí es cierta, esa experiencia puede cambiar la vida de quienes realmente estaban a la espera de una oportunidad. El ser productivo, es algo que educa, forma y hace crecer al ser humano. El proceso no es sencillo. Se necesita de paciencia y perseverancia. Y también, de ir aprendiendo de los yerros. 

De alguna forma, el apoyo para proyectos productivos es una muy buena semilla, porque en medio de todas las pobrezas, la que más urge erradicar, es la mental. Aquella que ha dictado estar sentado y esperanzado a que dios o un cambio de gobierno solucionen las cosas sin mover un solo dedo. Eso es un sueño de cristal. 

Incentivar la productividad, por donde se vea, es algo sumamente positivo. Un acierto del Gobernador y su esposa. Y por cierto, no hay nada mejor, para una persona adulta que le levante la autoestima, que sentirse útil. Esa es la cuestión.