Clínica de hemodiálisis rebasada en su capacidad

Como se recordará la clínica de hemodiálisis se fundó por la gestión de particulares, principalmente impulsada por la señora Esther Walter, de Indonesia radicada aquí en Ixtapa-Zihuatanejo, que a través de donativos se compraron las primeras máquinas además de la participación del gobierno del estado que fue autorizada durante el gobierno de  René Juárez y es inconcebible que la Secretaría de Salud la haya dejado en manos de particulares cuando son cientos de pacientes no sólo del municipio de Zihuatanejo sino que de varios municipios de la Costa Grande que son los que requieren de ese servicio.

Entrevistado al respecto el Dr. Alejandro Reséndiz Rosales, director del Hospital General Bernardo Sepúlveda Gutiérrez Informó que desde hace años esa clínica dejó de ser operada por el Hospital General, por lo que se requiere de mayor participación de la Secretaría de Salud para garantizar la atención a enfermos de los municipios; Tecpan, Petatlán, La Unión y Coahuayutla, e incluso se han tenido registros de pacientes de Lázaro Cárdenas.
Agregó que la clínica de Hemodiálisis ha sido rebasada por el incremento de pacientes de cinco municipios de la Costa Grande, lo que genera que hasta 12 enfermos renales se queden esperando a que un paciente muera o se cambie de clínica para poder ser atendidos. 
Añadió que en total se están tratando a 165 enfermos, y debido a la saturación por ahora se están quedando sin tratamiento nueve personas, pero se han registrado hasta 21 pacientes a la espera de tratamiento.

Añadió que “La clínica tiene un límite en su capacidad de atención, se realizan 60 sesiones al día, 360 a la semana. Los enfermos tienen tres sesiones por semana o dos de acuerdo a los resultados de laboratorio, lo que quiere decir que reciben 12 sesiones en promedio al mes”, dijo Resendiz Rosales.
Indicó que a los pacientes en espera se les explica que no hay lugar, por lo que deben esperar a que haya alguna baja en el servicio, es decir, que alguien se cambie de clínica o muera, y así poder incorporar a los que están en lista de espera.
En su tiempo la clínica de hemodiálisis de Zihuatanejo, fue la primera en fundarse en el estado esto representaba un gran orgullo para este puerto pero esto se debió a la incansable labor social para realizar todas las gestiones, lo que ocasionó que se saturara, “nos alimentamos de otros municipios, es un problema de la secretaría porque en ocasiones llegan hasta de Acapulco”.
Cuestionado sobre las denuncias de usuarios que se hicieron públicas a través de una diputada, en el sentido de mala atención y una revisión minuciosa a la empresa DICIPA, SA de CV responsable de proporcionar el servicio subrogado de hemodiálisis, dijo que ya se tuvo respuesta y se realizarán algunos cambios.
Por su parte, Gabriel Quintero, supervisor de la clínica, manifestó que en Guerrero y en el país está creciendo el número de enfermos renales, “somos un país que no se cuida, por eso tenemos más demanda y necesitamos más espacio, se realizará un cambió de las 18 maquinas para el tratamiento, en 15 días tendremos nueva tecnología, además cambios a la fachada con la renovación de las instalaciones para erradicar malos entendidos”.Así mismo aceptó que hay una deficiencia en el servicio, “pero es inherente al hospital, porque si nos dieran más presupuesto y un espacio más amplio se atendería a más personas”.
A su vez, el Dr. Onasis Pinzón Oregón, coordinador de los servicios de salud de la Secretaría de Salud estatal, explicó que el aumento se ha tenido en los últimos dos años, ya que cada año son más los pacientes diabéticos atendidos en Centros de Salud, “de cada 100 pacientes con diabetes, 30 son enviados a hemodiálisis”.

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