MEMORÁNDUM

***Otra lección del maestro dolor

Gerardo Ruano Cástulo

Como si se tratara de una lección que no hemos aprendido, el maestro dolor nos la vuelve a repetir. Y lo hace, en una misma fecha: 19 de septiembre. A 32 años del sismo de 1985. Aquél, que nos obligó a poner atención en el tema de la protección civil.

Al igual, que en ese entonces, nuestro país se ha vestido de luto. Las escenas son dolorosas. La gran diferencia, es que hoy existe un protocolo. El Gobierno está preparado y ya sabe lo que tiene que hacer. Se ha visto puntual en los lugares afectados. Las labores de rescate comenzaron pronto.

Destacable, como siempre, en éstos momentos complicados, la enorme solidaridad de nuestro pueblo. Como una manifestación elocuente, que somos más los que anhelamos vivir en paz y armonía. Los que deseamos el bien a los demás. Se ve en la lucha por salvar más vidas.

Los comentarios fuera de lugar en las redes sociales, se fueron apagando. Los estragos del sismo nos ubicaron en una realidad dolorosa. Del tremendo impacto de la naturaleza. De lo vulnerables que somos los seres humanos. Vino la lluvia de comentarios útiles. Dejar libres las vías de comunicación, incluida la red de internet, a efecto de colaborar en la agilidad de la solución a las emergencias.

Se avecinaba una larga jornada. No culmina, puesto que se vienen más acciones, a la par del rescate de atrapados y víctimas. Se tiene que cumplir con el protocolo. Se viene la revisión de inmuebles públicos. Así como de los particulares que sean pertinentes. Deben ofrecer garantías, para volver a ser usados o habitados.

No se pueden correr riesgos innecesarios. Y las preguntas siguen siendo las mismas, ¿Por qué a nosotros? ¿Por qué a México, y otra vez en 19 de septiembre? ¿Qué lección no hemos aprendido del maestro dolor?

Los más moralistas podrían decir que es un llamado a bajarle unas rayitas. Que nos hemos pasado, con el clima de violencia e inseguridad que se padece en el país. Como si se tratara de un castigo divino.

Los pragmáticos, podrían aducir, que estás cosas suceden aquí y en China. El caso, es que vivimos en un mundo de visiones distintas. Pero, en lo que no podemos disentir, es en lo doloroso de la situación. Coincidimos en que estamos de luto.

Tal vez, también, en que como sociedad, nos hemos relajado en el tema de la protección civil. Le dejamos gran peso de la responsabilidad al gobierno, bajo el pretexto, de que para eso los elegimos.  

Creo, que se debe voltear a la revisión de los edificios. Así como a la aplicación estricta de la ley en materia de construcciones y asentamientos. Por la zona sísmica y el enorme litoral que tiene nuestro país, hay mucha tarea por delante.

19 de septiembre. El maestro dolor nos vuelve a dar un duro jalón de orejas. Estamos de luto. Y lo seguiremos estando, si nos mantenemos naufragando en la inmovilidad e ignorancia.