Chilpancingo, Gro., febrero 5 de 2018 (IRZA).- La Diócesis de Chilpancingo-Chilapa condenó el homicidio de dos sacerdotes la mañana de este lunes en la cabecera municipal de Taxco, y demandó a las autoridades estatales una investigación “pronta y seria” para esclarecer esos hechos. Este lunes, los sacerdotes Benito Cuenca Mayo, Jorge Amando Vázquez Rodríguez y Agustín Beltrán Flores ofrecieron una conferencia para condenar el crimen de los presbíteros Germaín Muñiz García e Iván Añorve Jaimes.
Los dos sacerdotes católicos perecieron asesinados la madrugada de este lunes en Taxco, cuando fueron atacados a tiros por un supuesto grupo del crimen organizado, en un hecho violento que además dejó a dos hombres y dos mujeres lesionadas.
Informaron que el padre Germaín Muñiz García era originario de la comunidad de Pantla, municipio de Mártir de Cuilapan (Apango) y era párroco de la parroquia de San Cristóbal en la comunidad de Mezcala, municipio de Eduardo Neri (Zumpango).
En tanto que el padre Iván Añorve Jaimes estaba asignado a la parroquia La Sagrada Familia de la comunidad de Las Vigas, municipio de San Marcos.
Cuenca Mayo dio lectura a un comunicado donde informó que “las causas del asesinato de nuestros hermanos sacerdotes están siendo investigadas por las autoridades competentes y confiamos que pronto serán esclarecidas”.
Finalmente encomendaron “el alma de nuestros hermanos sacerdotes, rogando a la comunidad católica sus oraciones y a sus familiares el pronto consuelo por la pérdida tan lamentable de sus seres queridos”.
El sacerdote dio a conocer que el obispo Salvador Rangel iba camino a la Ciudad de México acompañando a unos peregrinos de la zona Norte de la entidad, y que lamentaba esos asesinatos.
Dijo desconocer las causas o los motivos por los que ambos sacerdotes estaban en esa zona de Taxco donde fueron asesinados. “No podemos especular, se están investigando las causas de este suceso; las autoridades tendrán que dar respuesta a esta situación, ya lo dirán las investigaciones. No tenemos ningún reporte de qué haya sucedido, la información está corriendo y no queremos especular nada hasta no estar completamente de acuerdo”.
Indicó que están viendo la “conveniencia” de salir a las calles a protestar por estos asesinatos y dio a conocer que el sacerdote Germain Muñiz sería trasladado en el transcurso de este lunes a su comunidad de origen en Pantla, donde este martes al mediodía se llevarían a cabo sus funerales.
El padre Benito Cuenca aceptó que la labor en el sacerdocio “siempre es de riesgo, nos implica nuestra labor pastoral estar en una situación de violencia y cada uno de nosotros debe de tomar las precauciones que sean necesarias”.
Señaló que “la labor pastoral a veces nos mueve, y cómo está la situación, todos estamos en riesgo. Amenazas siempre ha habido contra los sacerdotes, de ellos (los occisos) en particular no sabemos, por eso invitamos a nuestros hermanos a que estén alertas”.
Añadió que el obispo les pidió “solidarizarnos con familias e iniciar una jornada de oración y pedirle a la comunidad católica que se una. Exhortamos a las autoridades, pero no podemos dar línea; les pedimos que haya una investigación clara, precisa y pronta”.
Por su parte y mediante un comunicado, la Arquidiócesis de Acapulco pidió a las autoridades investigar y aplicar la justicia contra los responsables de asesinar a los dos sacerdotes y herir a otras personas.
“Como Iglesia estamos consternados ante este trágico suceso que enluta a toda la Comunidad Arquidiocesana y a la Comunidad de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa. Pedimos a las autoridades que una vez conocida la verdad, se actúe en justicia”, destaca el documento
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